Los intereses económicos marcan la cumbre del clima de Bonn

En las primeras sesiones de la cumbre del clima que se celebra en Bonn, los intereses económicos están definiendo las alianzas de los principales países participantes. Así, Estados Unidos camina de la mano con Rusia, mientras Europa castiga a un Washington a la defensiva. Los países exportadores de petróleo, por su parte, se quejan de que sufrirán un inmediato empobrecimiento con las medidas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero provocadas, en gran medida, por el uso de combustibles fósiles. "Se forman todo tipo de alianzas, esto es lo que hace que el proceso sea frustrantem...

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En las primeras sesiones de la cumbre del clima que se celebra en Bonn, los intereses económicos están definiendo las alianzas de los principales países participantes. Así, Estados Unidos camina de la mano con Rusia, mientras Europa castiga a un Washington a la defensiva. Los países exportadores de petróleo, por su parte, se quejan de que sufrirán un inmediato empobrecimiento con las medidas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero provocadas, en gran medida, por el uso de combustibles fósiles. "Se forman todo tipo de alianzas, esto es lo que hace que el proceso sea frustrantemente lento", comentó ayer el delegado australiano.Esta V Conferencia de las Partes del Convenio de Naciones Unidas sobre Cambio Climático que se celebra en Bonn hasta el próximo día 5, se fundamenta en la idea de que si los países ricos no trabajan juntos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, el calentamiento del planeta puede provocar grandes problemas medioambientales. La reducción se establece en el Protocolo de la Convención aprobajo hace dos años en Kioto, y ahora se trata de poner en marcha los mecanismos de acción para cumplimiento del mismo.

Sin embargo, cada país presiona para lograr lo que considera lo mejor para los propios intereses, no comprometiéndose a nada por encima de lo que considera su parte justa del potencial coste de reducir las emisiones. Estos intereses económicos hacen que Rusia y EEUU compartan el mismo barco en el asunto del clima, mientras sus políticas exteriores chocan en frentes como Chechenia o el acuerdo de prohibición de ensayos nucleares. La cuestión es que Washington quiere que se reconozca el derecho ilimitado a comprar cupos de emisión a otro país, y Rusia cuenta ya con los dólares procedentes de la venta de sus cupos. Pero esta alianza indispone a EEUU con la UE, que defiende la limitación de esa compra de derechos de contaminación.

Exportaciones de crudo

Por otro lado, los 11 países exportadores de petróleo de la OPEP hacen piña en Bonn en torno a la reivindicación de compensaciones económicas por el empobrecimiento que significará para ellos, aducen, un acuerdo de contención de emisiones que supondría menores exportaciones de crudo para países con políticas de reducción de consumo de combustibles fósiles.

El jefe de la delegación de Arabia Saudí, Mohamad Al Saban, afirmó ayer en Bonn que la OPEP podría perder 63.000 millones de dólares al año en el marco de un acuerdo global sobre el clima porque posiblemente exigiría aumentar los impuestos sobre los combustibles. Arabia Saudí perdería unos 25.000 millones de dólares, dijo. "El aumento de los impuestos sobre los combustibles provocaría una disminución de la demanda que nos haría retroceder, en los próximos años, a la era primitiva en que víviamos en el pasado", afirmó Saban.

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