Clarividencia
Cuando muere una persona tan cercana, la angustia que se siente es infinita. Quería a Tanis de una forma desproporcionada, a las horas de nuestra relación. Realmente un reloj no sirve para medir el tiempo en los encuentros con un hombre singular. Tanis lo era, sin duda, como arquitecto.Pero en este momento quiero destacar la singularidad de su clarividencia, de su sensibilidad, de su distinción, de su desmañada elegancia y, desde mi egoísmo, de su enorme amistad, que hace que hoy me encuentre aún más desvalido....
Cuando muere una persona tan cercana, la angustia que se siente es infinita. Quería a Tanis de una forma desproporcionada, a las horas de nuestra relación. Realmente un reloj no sirve para medir el tiempo en los encuentros con un hombre singular. Tanis lo era, sin duda, como arquitecto.Pero en este momento quiero destacar la singularidad de su clarividencia, de su sensibilidad, de su distinción, de su desmañada elegancia y, desde mi egoísmo, de su enorme amistad, que hace que hoy me encuentre aún más desvalido.
Pedro Casariego Hernández-Vaquero es arquitecto.