El lujo invisible
Los tejidos mostrarán para la próxima temporada de otoño-invierno hasta qué punto estamos de verdad en una carrera imparable de contenido futurista. La alta tecnología química consigue una especie de lujo invisible y un contenido que da sofisticación a la materia, y, por consiguiente, acercará el producto a una modernidad con perspectiva de futuro. Las mezclas entre elementos naturales y fibras de puro hallazgo tecnológico se imponen como la solución para encontrar el tejido de alta calidad capaz de competir con sus nobles parientes que llevan el marchamo del 100%.
La lana pura se comb...
Los tejidos mostrarán para la próxima temporada de otoño-invierno hasta qué punto estamos de verdad en una carrera imparable de contenido futurista. La alta tecnología química consigue una especie de lujo invisible y un contenido que da sofisticación a la materia, y, por consiguiente, acercará el producto a una modernidad con perspectiva de futuro. Las mezclas entre elementos naturales y fibras de puro hallazgo tecnológico se imponen como la solución para encontrar el tejido de alta calidad capaz de competir con sus nobles parientes que llevan el marchamo del 100%.
La lana pura se combina con una pequeña base de seda y con viscosa de alta calidad, provocando la aparición de un tejido de gran envergadura a la vez que con vuelo propio.
Por otra parte, las texturas juegan con esa clara tendencia hacia lo étnico y primitivo donde las tramas gruesas juegan entre nervios y costuras, y los coloreados o punto. Ese juego hace que los estampados aparezcan condicionados a sus versiones clásicas invernales (cuadros, espigas, rayas) o asociados a otras fantasías donde a la vez que desaparece el color también lo hace la representación realista.