Cartas al director

La calidad de la escuela pública

No puedo menos que indignarme por la falta de rigor que supone la noticia difundida recientemente en diferentes medios de comunicación sobre el alto número de repetidores en la escuela pública con respecto de los de la privada. Los resultados académicos de la escuela pública no pueden contemplarse en su globalidad porque atiende a un alumnado muy diverso, con diferentes necesidades educativas, lo cual no se corresponde con el alumnado de la privada que es mucho más uniforme. Por lo tanto, ¡basta ya de comparaciones!, pues nuestros alumnos, en igualdad de condiciones, también obtienen excelente...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

No puedo menos que indignarme por la falta de rigor que supone la noticia difundida recientemente en diferentes medios de comunicación sobre el alto número de repetidores en la escuela pública con respecto de los de la privada. Los resultados académicos de la escuela pública no pueden contemplarse en su globalidad porque atiende a un alumnado muy diverso, con diferentes necesidades educativas, lo cual no se corresponde con el alumnado de la privada que es mucho más uniforme. Por lo tanto, ¡basta ya de comparaciones!, pues nuestros alumnos, en igualdad de condiciones, también obtienen excelentes resultados. Habría que decir también que algunos colegios privados clasifican a los niños y niñas en aptos o no aptos para sus centros según la capacidad intelectual que demuestren o que a la mínima que un alumno les plantee un problema relevante, convencen muy sutilmente a los padres para que lo matriculen en otro centro. Y creo yo que si no ponen trabas a las subvenciones que reciben de las arcas públicas, tampoco deberían ponerlas a la hora de admitir a sus alumnos, de lo contrario, sería de justicia que se les retiraran las ayudas económicas que perciben y fueran a parar a la que realmente es la escuela de todos, la escuela pública. Decir también que la diversidad del alumnado de la escuela pública, resulta humanamente muy enriquecedora, pues ello nos permite aceptarnos tal y como somos, sin discriminación de ningún tipo, ni por la capacidad intelectual, raza, religión, ideología, sexo o estrato social y nos hace, por lo tanto, más solidarios,más tolerantes,más respetuosos y más humanos. En definitiva, me siento orgullosa de la calidad de nuestra escuela pública, la cual siempre aprueba la asignatura más importante, aquella que lima desigualdades, haciéndonos mejores personas, contribuyendo así a una sociedad más justa.- Andone Ubiria Aranburu.

Navidad sin adornos

Por razones de voltaje y/o tensión entre alcaldes, comerciantes y bombillas, la ciudad de Vitoria-Gasteiz no ha sido felizmente aún decorada de Navidad. Quisiera expresar mi ruego, a quien tenga la decisión en sus manos, de dejar las calles como están. Es una maravilla no ver iluminadas ni grandezas ni pobrezas, ni descomponerse las luces en un arco iris inalcanzable en una lágrima de soledad. Las luces tienen -o no tienen- que encenderse dentro de uno o en la intimidad de los hogares y no para beneficio de los comerciantes.-

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En