Cada vez protestan menos

La de ayer fue la tercera vez que se manifiestan los estudiantes andaluces en apenas un mes. Pero la protesta fue sensiblemente menos multitudinaria que las anteriores. La presencia de los estudiantes en la calle se ha desinflado convocatoria tras convocatoria. Salieron cerca de 3.000 estudiantes a manifestarse en las distintas capitales andaluzas.El detonante de los sucesivos paros convocados por el Sindicato de Estudiantes en Andalucía ha sido la Carta de Derechos y Deberes del alumno redactada por la Consejería, que estos días debate la comunidad educativa en busca de un consenso. El Sindic...

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La de ayer fue la tercera vez que se manifiestan los estudiantes andaluces en apenas un mes. Pero la protesta fue sensiblemente menos multitudinaria que las anteriores. La presencia de los estudiantes en la calle se ha desinflado convocatoria tras convocatoria. Salieron cerca de 3.000 estudiantes a manifestarse en las distintas capitales andaluzas.El detonante de los sucesivos paros convocados por el Sindicato de Estudiantes en Andalucía ha sido la Carta de Derechos y Deberes del alumno redactada por la Consejería, que estos días debate la comunidad educativa en busca de un consenso. El Sindicato de Estudiantes rechaza las "medidas sancionadoras" que se recogen en ese decreto de convivencia, que califican como "reaccionario y represor".

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En Valencia, los estudiantes de secundaria salieron a quejarse "por el caos educativo en que ha sumido el Partido Popular a la Comunidad Valenciana, en plena implantación de la LOGSE", según declararon. Fue la tercera manifestación más numerosa de España, tras Madrid y Barcelona. Más de 5.000 jóvenes de 15 y 16 años denunciaron la masificación y la falta de condiciones e infraestructura que padecen los institutos en una comunidad donde el 70% de los alumnos de 1º y 2º de ESO estudia aún en centros de Primaria.

Lanzando gritos de "!Queremos calefacción¡"y "¡No a los barracones¡", los estudiantes llegaron a la Consejería de Educación y entregaron un pliego de reivindicaciones en el que instan al consejero Francisco Camps a negociar el problema de la educación pública en la comunidad. La movilización concluyó sin incidentes y con una sentada en la plaza del Ayuntamiento.

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