Nani Flores, esposa del patrón: "Esta pesadilla es cuestión de dinero"

Nani Flores, de 32 años, se ha lanzado a una actividad frenética para conseguir la liberación de su esposo, Antonio Lozano, patrón del Brizz III al que no ve desde el 1 de diciembre, cuando se hizo a la mar.

Asegura haber sacado fuerzas de la imagen de su marido. "Se me pone delante y me da fuerzas", afirma. Advierte que el tiempo es oro y reclama ayuda a los bancos y a las instituciones: "Al final, es cuestión de dinero, resulta muy duro pero toda esta pesadilla se reduce al dinero, y hacen falta los millones para que vuelvan a casa estas dos personas".

La esposa del ...

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Nani Flores, de 32 años, se ha lanzado a una actividad frenética para conseguir la liberación de su esposo, Antonio Lozano, patrón del Brizz III al que no ve desde el 1 de diciembre, cuando se hizo a la mar.

Asegura haber sacado fuerzas de la imagen de su marido. "Se me pone delante y me da fuerzas", afirma. Advierte que el tiempo es oro y reclama ayuda a los bancos y a las instituciones: "Al final, es cuestión de dinero, resulta muy duro pero toda esta pesadilla se reduce al dinero, y hacen falta los millones para que vuelvan a casa estas dos personas".

La esposa del marinero quiere creer que todo acabará bien y aún no llega a concebir cómo será su vida en el futuro. "Voy a hacer todo lo posible para que Antonio regrese. Esto es algo grave que está pasando en nuestras vidas y repercutirá en el futuro. No será una cosa que olvidemos pronto. Son circunstancias que siempre les pasan a los demás. Pero ahora me ha ocurrido a mí. Siempre hay injusticias, gente que está injustificadamente en la cárcel por delitos que no ha cometido. Pero ahora incumbe a mi marido. Al principio sentía sorpresa, luego, esperanza en una resolución rápida, y ahora, ya, la locura".

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A pesar de la pesadilla que está viviendo, no se atreverá a pedirle a su esposo que deje el mar. "Cuando regrese", comenta, "él tendrá que decidir. Es una persona a la que en cuestión de trabajo no le gusta que nadie le diga lo que tiene que hacer. Es marinero desde siempre, desde que tuvo edad de hacerse a la mar. Ese es su oficio y yo lo respeto".

Si algo tiene claro es que la respuesta de las administraciones, hasta ahora, no ha sido satisfactoria. "Yo no milito en ningún partido, pero tengo ideas propias. Siempre confié en que el Gobierno central iba a arreglar este problema con rapidez. Pero nos hemos encontrado con que está costando mucho esfuerzo. Las personas directamente afectadas nos vemos obligadas a permanecer al pie del cañón día y noche. No solucionaron nada cuando nos limitábamos a enviar un fax. Esa es mi decepción con los políticos. El Gobierno central tiene que dar soluciones rápidas: es su obligación".

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Nani Flores comparte el sufrimiento con Cinta Requena, la esposa del jefe de máquinas, que también permanece apresado. Cinta acaba de cumplir 34 años, es ama de casa, habla muy poco y rompe a llorar cuando recuerda el día que embarcó su marido: el 20 de marzo. Ahora trata de transmitir diariamente a Domingo López, en las conversaciones telefónicas que mantienen, mensajes de esperanza, porque lo encuentra anímicamente roto. Ayer se permitió un detalle trivial: le dijo que el Atlético de Madrid, el equipo de toda la vida de Domingo, había ganado 3-0 al Lazio.

"Allí no hay justicia"

Ahora tiene todas sus esperanzas puestas en las negociaciones para conseguir los 38 millones de multa. "Esa es mi esperanza. Espero que los bancos ayuden a la empresa armadora, que asegura que no tiene tanto dinero. También confío en que la Junta de Andalucía o el Ministerio de Asuntos Exteriores avalen a la compañía en caso de necesidad. No queremos pensar en que finalmente se haga el juicio, porque lo perderemos. Allí no hay justicia. Prima el dinero", afirma.De sus dos hijos, el mayor le pregunta a cada momento cuándo llegará su padre. Se mantiene con ánimos por la solidaridad de sus vecinos de Isla Cristina y, sin embargo, lamenta la actitud de Asuntos Exteriores: "Están trabajando, pero yo les pido que se impliquen más".

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