Las sentencias de la discordia

La polémica sobre la participación de las mujeres en el Alarde saltó del ámbito local a las instituciones y después a los tribunales. Mujeres de Irún y de la cercana Hondarribia llevaron a sus respectivos ayuntamientos ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco por apoyar unos desfiles que no les admitían en una posición igualitaria.El máximo tribunal vasco dio el pasado 23 de enero un espaldarazo inequívoco a las reivindicaciones de ambos colectivos, que cuentan con el apoyo moral y material de hombres en los desfiles. En sus sentencias reconoció el derecho de las mujeres "a partici...

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La polémica sobre la participación de las mujeres en el Alarde saltó del ámbito local a las instituciones y después a los tribunales. Mujeres de Irún y de la cercana Hondarribia llevaron a sus respectivos ayuntamientos ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco por apoyar unos desfiles que no les admitían en una posición igualitaria.El máximo tribunal vasco dio el pasado 23 de enero un espaldarazo inequívoco a las reivindicaciones de ambos colectivos, que cuentan con el apoyo moral y material de hombres en los desfiles. En sus sentencias reconoció el derecho de las mujeres "a participar en el Alarde, en igualdad de condiciones que sus conciudadanos hombres" y criticó la actitud de los dos alcaldes, el socialista Alberto Buen Lacambra en Irún y el nacionalista Borja Jáuregui en Hondarribia. La Carta Magna "vincula a todos los poderes públicos" argumentó el fallo, y les obliga a "promover las condiciones para que la [igualdad] de los individuos y de los grupos sea real y efectiva".

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La sentencia también supuso un varapalo a los argumentos de los partidarios del Alarde tradicional. "El carácter histórico de una institución", sentenció, "no puede excluir, por sí sólo, su contraste con la Constitución".

Para apoyar su resolución se fundamentó, entre otros, en dos informes que solicitó a expertos para conocer más de cerca la historia del Alarde, que en el caso de Irún se remonta a 1881. Estos textos resaltan la importancia del papel que jugaron las mujeres durante las dos batallas que han dado origen a las fiestas de las localidades fronterizas, por lo que el tribunal resolvió que ni siquiera la historia puede servir de apoyo a quienes quieren restringir el papel de la mujer en la fiesta. Hasta la fecha, las mujeres podían participar en el Alarde una sola vez en su vida como cantineras y con restricciones que afectan a su estado civil: deben ser solteras.

"La naturaleza de los dos alardes" indicó el tribunal "no parece ser fiel representación del hecho histórico". Los informes atestiguan que a lo largo del tiempo los desfiles han sufrido cambios en la vestimenta e incluso en su propia composición.

El Ayuntamiento de Irún resolvió no recurrir esta resolución. Sí lo hizo el consistorio vecino, que ha llevado el asunto al Supremo. Tras la sentencias, se han sucedido en Irún intentos frustrados de negociación. Pero, hoy aún circulan por las calles panfletos insultantes contra quienes apoyan que participe la mujer.

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