Cuca Canals juega con la imperfección, literaria en 'La hescritora'

Cuando escribe novelas, Cuca Canals (Barcelona, 1962) hace un esfuerzo por distanciarse del mundo del cine. A su primera novela, Berta la larga, incluso le suprimió los dialogos, pero hay que decir que sin ningún éxito. La novela ha sido comprada para ser adaptada al cine y en estos momentos se encuentra en Hollywood en busca de productor para la película. Ahora, una vez acabada su segunda novela, La hescritora (Plaza y Janés), Cuca Canals ha seguido un proceso parecido, aunque, en este caso, en vez de cargarse los diálogos buscó a una escritora muy preocupada con las letras como protagonista,...

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Cuando escribe novelas, Cuca Canals (Barcelona, 1962) hace un esfuerzo por distanciarse del mundo del cine. A su primera novela, Berta la larga, incluso le suprimió los dialogos, pero hay que decir que sin ningún éxito. La novela ha sido comprada para ser adaptada al cine y en estos momentos se encuentra en Hollywood en busca de productor para la película. Ahora, una vez acabada su segunda novela, La hescritora (Plaza y Janés), Cuca Canals ha seguido un proceso parecido, aunque, en este caso, en vez de cargarse los diálogos buscó a una escritora muy preocupada con las letras como protagonista, pero tampoco ha conseguido su propósito: "Soy una persona muy visual, de hecho antes de escribir parto de las imágenes", aseguró ayer consciente de que se trata de una historia muy cinematográfica.El hecho de haber trabajado antes en publicidad, el haber crecido en un entorno muy pictórico (su padre copiaba obras de arte) y el ser la guionista oficial de Bigas Luna, con el que ha escrito Jamón, jamón, Huevos de oro, La teta y la luna y La camarera del Titanic, han marcado su trayectoria literaria.

Cuca Canals, como la protagonista de su última novela, se considera una escritora "imperfecta", por eso escribe su nombre con h. Ese detalle de su currículo y el hecho de haber tenido una profesora cuando niña que siempre la ragañaba por las faltas ortográficas le animaron escribir la novela, planteada como un homenaje a las letras y a las palabras que la hacen posible.

No es partidaria de escribir en términos demasidado trágicos. "Me gustan las historias dramáticas y las grandes historias de amor, pero cuando escribo siempre busco un final donde haya luz". A sus personajes siempre les dota de humor y de ironía, dos cosas sin las que ella no puede vivir.

Literatura abstracta

No entiende la autora de La hescritora el follón que provocaron las palabras de García Márquez sobre el uso de la ortografía en México: "En pintura hay una libertad que no entiendo por qué no existe en literatura: si Miró pintaba como un niño y nadie se metió con él, ¿por qué no funciona la literatura abstracta?''.Canals, que ayer viajó a Madrid para la presentación de La hescritora, realizada a última hora de la tarde en la Filmoteca Nacional con Bigas Luna como presentador, trabaja en estos momentos con el director en la adaptación cinematográfica de Volaverunt, la novela de Antonio Larreta que ganó un premio Planeta.

Como escritora ha tenido muchas satisfaciones, pero ninguna como la de ver que "lo que has escrito camina". "Es una sensación maravillosa. Para mí fue de una emoción insuperable cuando vi a Penélope Cruz en la pantalla", asegura al referirse al personaje que interpretaba la actriz en Jamón, jamón, su primer guión cinematográfico.

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