El teatro de texto regresa a América Latina
Todos coinciden en que la literatura dramática vive una efervescencia en América Latina, donde se asiste a un regreso del teatro de texto, y en que los autores del otro lado del Atlántico son poco conocidos en España. Ahora bien, autores y directores no se ponen de acuerdo sobre la razón de este renacimiento ni se atreven a trazar rasgos comunes. La Casa de América de Madrid acoge un ciclo de lecturas dramatizadas con cinco autores latinoamericanos.
"América Latina vive una avalancha de obras donde se observa un resurgir del teatro de texto después de una época en la que predominaro...
Todos coinciden en que la literatura dramática vive una efervescencia en América Latina, donde se asiste a un regreso del teatro de texto, y en que los autores del otro lado del Atlántico son poco conocidos en España. Ahora bien, autores y directores no se ponen de acuerdo sobre la razón de este renacimiento ni se atreven a trazar rasgos comunes. La Casa de América de Madrid acoge un ciclo de lecturas dramatizadas con cinco autores latinoamericanos.
"América Latina vive una avalancha de obras donde se observa un resurgir del teatro de texto después de una época en la que predominaron las obras de creación colectiva y lenguaje gestual. En cualquier caso, lo que más maravilla es la diversidad del teatro latinoamericano, así como su búsqueda de la función del teatro". Con estos comentarios el autor y director español José Sanchis Sinisterra trató de definir los ejes de este primer festival de lecturas dramatizadas,que se celebrará entre el 2 y el 6 de marzo.
Bajo la premisa de que gentes del teatro de España dirijan las lecturas dramatizadas, la Casa de América ha programado La puta madre o la orestiada de Chile, de Marco Antonio de la Parra; Enfermos de esperanza, del mexicano Enrique Mijares; La pecadora, habanera para piano, de la uruguaya Adriana Genta; La noche, del cubano Abilio Estévez, y Atando cabos, de la argentina Griselda Gambaro. Los directores Guillermo Heras, María Ruiz, Juan Antonio Hormigón, Juan José Granda y Rodrigo García serán, respectivamente, los encargados de poner en escena estas lecturas.
Aunque ninguno de los autores se aventura a calificar de político su teatro, lo cierto es que la realidad social se impone a través del conflicto de Chiapas, de la difícil encrucijada de Cuba o de las resacas de las dictaduras en Chile y en Argentina. Sólo en la obra de la uruguaya Genta el tono poético prima sobre la visión realista.