Ballester expone en Logroño retratos de edificios

Cuarenta. y cinco obras de José Manuel Ballester, en las que se confrontan arquitectura y paisaje, se exponen en Logroño hasta el 30 de noviembre en la sala Amós Salvador. Edificios en Madrid de Rafael Moneo (la estación de Atocha, cuyas distintas fases de construcción Ballester ha pintado a lo largo de los años), Sáenz de Oíza (los recintos feriales), Cruz y Ortiz (La Peineta), Yamasaki (torre Picasso) o Philiph Johnson (las torres KIO) aparecen en los trabajos de Ballester (1960), en los que se refleja una preocupación "por la cualidad de la piel de las cosas" según el comisario d...

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Cuarenta. y cinco obras de José Manuel Ballester, en las que se confrontan arquitectura y paisaje, se exponen en Logroño hasta el 30 de noviembre en la sala Amós Salvador. Edificios en Madrid de Rafael Moneo (la estación de Atocha, cuyas distintas fases de construcción Ballester ha pintado a lo largo de los años), Sáenz de Oíza (los recintos feriales), Cruz y Ortiz (La Peineta), Yamasaki (torre Picasso) o Philiph Johnson (las torres KIO) aparecen en los trabajos de Ballester (1960), en los que se refleja una preocupación "por la cualidad de la piel de las cosas" según el comisario de la muestra, Pedro Azara.

"La arquitectura contemporánea me sirve como punto de meditación sobre las gigantescas escenografias en las que desarrollamos nuestras vidas", comenta Ballester. Añade que la buena arquitectura juega a su favor en el empeño, aunque no descárta, otras obras que, aun no pareciéndole tan interesantes, plásticamente le resultan adecuadas a su propósito.

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