Entrevista:

"Los modelos del calentamiento terrestre son todavía ingenuos"

Aplicar las matemáticas a problemas reales, que preocupan a la sociedad, es la ocupación principal de Jesús Ildefonso Díaz, un matemático que desde su inmersión en la matemática pura ha pasado a trabajar en modelos sobre fusión nuclear y el calentamiento de la Tierra. Este último tipo de modelos es la base de las decisiones políticas que deben tomarse dentro de dos semanas en la Cumbre del Clima en Kioto (Japón). Díaz (Toledo, 1950), catedrático en la Universidad Complutense, miembro de la Comisión de Medio Ambiente de la Unión Matemática Internacio nal, toma posesión de su plaza de académico ...

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Aplicar las matemáticas a problemas reales, que preocupan a la sociedad, es la ocupación principal de Jesús Ildefonso Díaz, un matemático que desde su inmersión en la matemática pura ha pasado a trabajar en modelos sobre fusión nuclear y el calentamiento de la Tierra. Este último tipo de modelos es la base de las decisiones políticas que deben tomarse dentro de dos semanas en la Cumbre del Clima en Kioto (Japón). Díaz (Toledo, 1950), catedrático en la Universidad Complutense, miembro de la Comisión de Medio Ambiente de la Unión Matemática Internacio nal, toma posesión de su plaza de académico en la Real Academia de Ciencias Exactas, Físi cas y Naturales el próximo miércoles, con un discurso dedicado a la relación ciencia-sociedad titulado El mundo de la ciencia y las matemáticas del mundo. Díaz sustituye al astró nomo José María Torroja y el número de su medalla es el 13, del que es "un bonito número primo".Pregunta. ¿Qué tipo de matemáticas hace?

Respuesta. Son matemáticas aplicadas, las que tienen una motivación en el mundo externo a las matemáticas. Me centro en la climatología, el medio ambiente y la fusión nuclear.

P. ¿Cuál es su experiencia en fusión nuclear?

R. He participado en el proyecto español Sterallator TJ II una máquina para experimentar generación de energía en plasmas de fusión, en la que el Ciemat, del Ministerio de Industria, y Euratom han invertido mas de 5.000 millones de pesetas. He hecho, con mi equipo, modelos nuevos para el comportamiento del plasma en condiciones no simétricas, como son las del Sterallator.

P.¿Qué pretenden los modelos matemáticos del clima?

R. Me interesé por los temas de medio ambiente de la mano del matemático francés Jacques Louis Lions. Es un campo riquísimo, que además nos permite colaborar con grandes especialistas de otros campos. Aparecen problemas muy interesantes y difíciles, ya suscitados en tiempos de Fourier, que trató el tema del calentamiento de la Tierra. Se refieren tanto a la predicción del tiempo a corto plazo como a los modelos de climatología a largo plazo, que tienen que ver con la elevación de la temperatura de la Tierra de forma global. Éstos son en los que he trabajado más.

P. ¿Hasta dónde han llegado estos modelos?

R. Desde el punto de vista matemático, los modelos de calentamiento terrestre son todavía ingenuos. Quiero decir que hay toda una jerarquía de modelos e incluso los más simples están aún por descifrar matemáticamente, aunque desde el punto de vista computacional sea posible abordar modelos muy avanzados.

P. ¿Cuál es la mayor dificultad

R. Es lo que sellama el efecto de coalbedo, un factor que indica la influencia en el balance de energía de la reflexiónde la radiación solar en los blancos casquetes polares. Sus límites cambiantes con el tiempo hacen muy dificil predecir la solución delodelo global. Hay interaccioes muy complicadas. Además, en modelos anteriores hemoshallado posibles indeterminaciones, que proporcionan más de una respuesta.

P. Y sobre la base de lo que indican estos modelos, todavía imperfectos, piensa que hay que tomar medidas para evitar el calentamiento global?

R. Hay indicios muy serios datos sobre el estado de los glaciares, por ejemplo- de que algo conviene hacer; es difícil optar por una sola respuesta, pero es importante tener conciencia de que existe el problema y de que se debería controlar. Un fenómeno se puede estudiar desde dos puntos de vista: la observación, como en la astronomía, o para intentar controlarlo. Hemos demostrado matemáticamente que para ciertos modelos de clima habría opciones para actuar con eficacia sobre el clima. La dificultad esta en que la sociedad haga real estas respuestas teóricas.

P. Existen dificultades para correr los modelos en los ordenadores.

R. Yo trabajo en la parte más conceptual, pero mis colegas tienen a su disposición suficientes ordenadores potentes, en la Complutense, en el Instituto Nacional de Meteorología, en el Ciemat, o bien mediante Internet, en redes internacionales.

P. ¿Aumenta en España el número de matemáticos dedicados a aplicaciones?

R. Está llegando a nuestro país un concepto de la matemática, que ya existe en otros países, que hace que un matemático aplicado pueda dar respuestas a problemas determinados de la industria con tanta eficacia como los ingenieros o más. Con la concepción tradicional de la matemática, un matemático podría echar un pulso a un ingeniero en esos fines.

P. ¿A que se refiere su discurso?

R. Se cumple el centenario del ingreso de Ramón y Cajal en la Academia. Habló de las condiciones sociales de la ciencia y pensé en hacer un repaso a final de siglo de la valoración social de la ciencia. Un científico tiene que utilizar distintos lenguajes para comunicarse con distintos círculos de personas. Hablo también, lógicamente, de las matemáticas de manera especial y de mi área de trabajo en particular.

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