Los agentes temen el cáncer radiactivo
Los policías que protegen el transporte de residuos nucleares temen sufrir consecuencias negativas para su salud, según denuncian sindicatos del gremio. El presidente del sindicato policial, Hermann Lutz, declaró -tras hablar con la ministra federal de Medio Ambiente, la democristiana Angela Merkel- que no han podido eliminarse las dudas sobre radiación para los policías. El sindicalista se pregunta hasta dónde asumir políticamente este riesgo. Según Lutz, el problema se soluciona a costa de los policías.Cerca del castor, recipiente que transporta los residuos, la temperatura llega a 60 grados...
Los policías que protegen el transporte de residuos nucleares temen sufrir consecuencias negativas para su salud, según denuncian sindicatos del gremio. El presidente del sindicato policial, Hermann Lutz, declaró -tras hablar con la ministra federal de Medio Ambiente, la democristiana Angela Merkel- que no han podido eliminarse las dudas sobre radiación para los policías. El sindicalista se pregunta hasta dónde asumir políticamente este riesgo. Según Lutz, el problema se soluciona a costa de los policías.Cerca del castor, recipiente que transporta los residuos, la temperatura llega a 60 grados. La agencia de prensa DPA recoge la declaración de un policía: "Esa cosa es espantosamente caliente y eso es siempre peligroso". Temen los policías que la radiación produzca cáncer. Por eso el sindicato policial se opone a la operación.
Un catedrático de Marburgo, Horst Kuni, experto en medicina nuclear, denunció hace ya dos años los efectos de las radiaciones en los cromosomas y el riesgo de cáncer. La ministra Merkel lamenta que "por medio de afirmaciones sin fundamento científico se azuce el miedo"
El encargado del operativo policial ayer en Baden-Wurtemberg, Klaus Schmerling, declaró que ningún policía se había negado a participar. Explicó el jefe que psicólogos y científicos habían aclarado a los efectivos que no había peligro. Además se repartieron a los policías hojas explicativas sobre la ausencia de riesgos para la salud. Pero queda la duda. Los policías que presten servicio en las cercanías del castor serán relevados a menudo y lleverán contadores para medir el grado de radiactividad.