250 familias chabolistas permanecen todavía sin asistencia sanitaria en la Comunidad

Más de 250 familias chabolistas carecen de tarjeta sanitaria para recibir asistencia gratuita en los centros públicos de Madrid. El último informe elaborado por la Consejería de Salud sobre los poblados de infravivienda reconoce esta carencia en los poblados de Pozo del Huevo (71 familias sin tarjeta sanitaria), Altamira (4), Los Focos (98), La Rosilla (18), Campamento (3), Las Cárcavas / Los Olivos (6), Las Liebres (16), La Quinta (9), La Veguilla (9), Cerro de la Mica (8), Jauja (8) y San Fermín (4). IU lamentó ayer esta situación: "Es sorprendente y requiere una rápida solución".

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Más de 250 familias chabolistas carecen de tarjeta sanitaria para recibir asistencia gratuita en los centros públicos de Madrid. El último informe elaborado por la Consejería de Salud sobre los poblados de infravivienda reconoce esta carencia en los poblados de Pozo del Huevo (71 familias sin tarjeta sanitaria), Altamira (4), Los Focos (98), La Rosilla (18), Campamento (3), Las Cárcavas / Los Olivos (6), Las Liebres (16), La Quinta (9), La Veguilla (9), Cerro de la Mica (8), Jauja (8) y San Fermín (4). IU lamentó ayer esta situación: "Es sorprendente y requiere una rápida solución".

"Cuando el servicio sanitario está universalizado en toda la región, es inconcebible que todavía permanezcan centenares de familias sin tarjeta sanitaria en muchos de los poblados chabolistas atendidos por el Consorcio para el Realojamiento de la Población Marginal", señaló ayer Virginia Díaz, diputada regional de IU. Su grupo parlamentario exigirá en la Asamblea que se -garantice la asistencia sanitaria a todas estas familias- y se les facilite la tarjeta sanitaria."Con nuestras denuncias perseguimos un realojo digno para todas estas familias. Pero hasta que llegue ese momento, hay que garantizarles unas condiciones mínimas en sus poblados", continúa la parlamentaria. "Aunque el hospital Gregorio Marañón atiende a todo el mundo que llega por urgencias sin pedirles tarjeta sanitaria, los chabolistas que carecen de este documento no puecien acudir a los especialistas médicos ni a los centros de salud para prevenir -sus enfermedades", afirma.

Díaz reclamó a la Consejería de Sanidad los datos sobre los poblados chabolistas en la Comunidad. Se los remitieron incompletos. Este documento, el último oficial sobre el estado de los chabolistas, reconoce la existencia de múltiples deficiencias.

Roedores incontrolados

Las peores condiciones para vivir las sufren los chabolistas de Los Focos y Cerro de la Mica. En estos dos poblados, según el informe de Sanidad, hay decenas de familias que carecen de tarjeta sanitaria, de agua corriente, de sistema de evacuación de basuras y de alcantarillado. Por si no fueran bastantes inconvenientes, los inquilinos de estas infraviviendas viven junto a "roedores y animales domésticos no controlados", según reconoce Sanidad.Además, la Comunidad reconoce en dos poblados la existencia de más de 100 familias no censadas, a las que no correspondería el realojo. Del resto de zonas inspeccionadas no apunta el número de chabolistas no censados.

"Nosotros calculamos que, además de las 1700 familias registradas oficialmente en el Consorcio, existen otras 2.300 que viven en chamizos repartidos por toda la región. Ellos, sin embargo, sólo aceptan que existen 1.000 familias sin censar", explica Virgina Díaz.

La diputada de IU denuncia que el informe es incompleto: "No dice nada del mayor poblado chabolista, el de Boadilla del Monte, que hasta ayer tenía 400 chabolas. En los últimos meses ha habido dos. incendios, y nadie hace nada. Las familias de este poblado viven en condiciones infrahumanas".

Este periódico intentó, sin éxito, conocer la opinión de los responsables del Consorcio para el Realojamiento y de la propia Consejería de Salud sobre los datos aportados por IU y sobre los problemas apuntados en el informe regional.

Hace tan sólo unos meses, la Consejería de Salud concluyó otro estudio sobre las enfermedades de los chabolistas. Un 11% de los habitantes de los 11 poblados que inspeccionó padecían algún tipo de enfermedad física o psíquica. En el caso de La Celsa, el porcentaje se elevaba al 22%, con los siguientes problemas: había 28 vecinos con politoxicomanías, 13 con artrosis, ocho con bronquitis, seis con glaucoma, cinco con epilepsia, y medio centenar más con otro tipo de padecimientos (depresiones, reúma, sida, úlcera de estómago, problemas cardiacos, renales o diabetes).