Gallo afirma que permanece lejana la cura del sida
No existen pruebas de que los nuevos tratamientos combinados puedan llegar a cura el sida, afirma el investigador estadounidense Robert Gallo, y esta situación seguirá así durante mucho tiempo. "Parece que podemos llegar a frenar el progreso de la enfermedad, pero ¿podrá el enfermo llevar una vida normal?", se preguntó. "No lo sabemos ni lo sabremos en vanos años", se contestó y añadió que tampoco se sabe si un indivirduo con virus no detectable puede considerarse no infeccioso.Gallo, pionero en el estudio de los retrovirus, familia a la que pertenece el virus del sida, señaló en la reunión an...
No existen pruebas de que los nuevos tratamientos combinados puedan llegar a cura el sida, afirma el investigador estadounidense Robert Gallo, y esta situación seguirá así durante mucho tiempo. "Parece que podemos llegar a frenar el progreso de la enfermedad, pero ¿podrá el enfermo llevar una vida normal?", se preguntó. "No lo sabemos ni lo sabremos en vanos años", se contestó y añadió que tampoco se sabe si un indivirduo con virus no detectable puede considerarse no infeccioso.Gallo, pionero en el estudio de los retrovirus, familia a la que pertenece el virus del sida, señaló en la reunión anual de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia que no es el momento de hablar de cura y recordó que el 99% de los infectados en el mundo no pueden permitirse el tratamiento con inhibidores de la replicación del virus. Recordó que estos nuevos medicamentos surgen de los trabajos de ciencia básica de los años ochenta, entre , ellos los suyos, y comentó que en la mayoría de un escaso número de personas tratadas durante un año en Francia con estos medicamentos el virus resurgió con fuerza al abandonar el tratamiento, según datos todavía no publicados.
El investigador, cuyo prestigio sufrió un duro golpe tras demostrarse que no fue coautor del descubrimiento del virus, sino que utilizó las muestras del investigador francés Luc Montagnier, fue fichado por la Universidad de Maryland, tras dejar los Institutos Nacionales de la Salud. Su trabajo se centra ahora en la demostración de que unas sustancias producidas por el cuerpo, las quimioquinas, actúan como inhibidores naturales del virus y serían la explicación de que algunos infectados no desarrollen la enfermedad.