Un acusado de violación pasó las navidades en la cárcel pese a que la prueba del ADN garantizó su inocencia

Jesús Deus Pazos, un labrador de 54 años de Val do Dubra (La Coruña) salió a última hora de la tarde de ayer de la prisión provincial después de casi cinco meses de internamiento por un delito que no cometió: violar a una menor de 14 años, disminuida psíquica, vecina de su misma aldea de Bembibre. Deus pasó las navidades preso a pesar de que el 16 de diciembre la juez que instruía el sumario recibió la prueba de ADN que establecía sin lugar a dudas que él no era, el padre del niño que espera la menor.Había sido precisamente el embarazo de su hija lo que decidíó a los padres el pasado agosto a ...

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Jesús Deus Pazos, un labrador de 54 años de Val do Dubra (La Coruña) salió a última hora de la tarde de ayer de la prisión provincial después de casi cinco meses de internamiento por un delito que no cometió: violar a una menor de 14 años, disminuida psíquica, vecina de su misma aldea de Bembibre. Deus pasó las navidades preso a pesar de que el 16 de diciembre la juez que instruía el sumario recibió la prueba de ADN que establecía sin lugar a dudas que él no era, el padre del niño que espera la menor.Había sido precisamente el embarazo de su hija lo que decidíó a los padres el pasado agosto a denunciar la violación. La menor acusó en dos de sus tres declaraciones como autor a su vecino, conocido en Bembibre como Chucho, pero como resaltaron ayer los Abogados defensores, Carlos Corredoira y María Sierra, no sin contradicciones.

Pese a ello, y a que los médicos no apreciaron signos de violencia al examinar a la niña, primero la sustituta y después la titular del Juzgado de Instrucción de Ordes (La Coruña) decretaron la prisión. "Cuando entré, me habría matado si hubiese tenido una pistola", recordaba ayer en el exterior de la cárcel Chucho, visiblemente nervioso después de abrazar a sus abogados y a un primo que fue a recibirle. "Dentro no me trató mal esta gente, pero sí tuve ataques de rabia, dolores de cabeza, disgustos...", murmuró.

Sus abogados, más explícitos, señalaron su extrañeza tanto por el encarcelamiento, "a causa de un testimonio contradictorio y pese a que ni los padres de la niña ni los vecinos los hubiesen visto nunca juntos" como por la tardanza en ordenar la excarcelación. "Todavía me pregunto el porqué de la demora", indicó Corredoira. "Después de obtener los resultados excluyentes del ADN tuvimos todavía que enviar un escrito de petición de libertad, reiterando las contradicciones que figuraban en el sumario".

Los abogados de Deus están estudiando ejercer acciones legales para resarcir a su defendido. La compensación más inmediata, será sin embargo que podrá asistir hoy a la fiesta de su aldea.

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