COYUNTURA ECONÓMICA

España cumplirá en 1997 el tope de déficit fijado en Maastricht pero no el de inflación

España cumplirá al final del año 1997 el requisito de déficit público pactado en Maastricht (3% del PIB) -al igual que todos los demás socios de la Unión Europea (UE), salvo Italia y Grecia- pero no el de inflación. Actualmente no cumple ninguno, lo que le ocurre también a Italia, Grecia y Portugal. Así lo indica la Comisión Europea en sendos documentos que aprobará hoy. La conclusión es que España no tiene garantizado el acceso al curo en la primera oleada, a diferencia de la mayoría de Estados del Norte europeo, pero tampoco le es imposible, si realiza esfuerzos adicionales.

El do...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

España cumplirá al final del año 1997 el requisito de déficit público pactado en Maastricht (3% del PIB) -al igual que todos los demás socios de la Unión Europea (UE), salvo Italia y Grecia- pero no el de inflación. Actualmente no cumple ninguno, lo que le ocurre también a Italia, Grecia y Portugal. Así lo indica la Comisión Europea en sendos documentos que aprobará hoy. La conclusión es que España no tiene garantizado el acceso al curo en la primera oleada, a diferencia de la mayoría de Estados del Norte europeo, pero tampoco le es imposible, si realiza esfuerzos adicionales.

Más información

El documento Previsiones económicas de otoño dibuja en el caso español un panorama matizado, de grises para 1997, el ejercicio que servirá para la criba de países que accedan al euro. Blanco: será uno de los trece países que alcancen a cumplir el requisito de déficit (3%), a excepción de Italia (3,3%) y de Grecia (6,9%).Pero negro también. El crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) español será del 2,1 % y no del 2,2% como prevé el Gobierno. Y la inflación alcanzará el 2,9%, inferior al 3,6% previsto por Bruselas en el examen de la pasada primavera, pero superior al 2,6% en que se cifra el objetivo del Gobierno.

La referencia de la inflación es móvil. No debe ser superior en 1,5 puntos a la de los tres mejores, que a su vez la van mejorando a mayor velocidad. La referencia se situaba en agosto en el 1,1%. El diferencial se situaría 1,8 puntos por encima, superior en tres décimas al autorizado, o en más, si los mejores aún reducen más su inflación. Las reformas estructurales necesarias para reducir precios pueden no llegar a tiempo, porque su efecto se nota al cabo de un tiempo y porque lo que cuenta no es el dato de llegada, sino los de los últimos doce meses.

Pero el Informe sobre la convergencia, al que ha tenido acceso EL PAÍS, que se centra en el año 1996 y no en las expectativas para 1997, reconoce por vez primera que hay al menos seis métodos para el cálculo del requisito de inflación, basándose en otras tantas referencias: el mejor país en precios, el segundo mejor, el tercero, el promedio de los dos mejores, el promedio de los tres mejores y el promedio ponderado de los tres mejores; todo ello más 1,5 puntos porcentuales. Los resultados de aplicar cada método "son casi idénticos", indica el texto, porque aplicando cada uno de los seis, siempre diez países habrían cumplido el requisito y cinco, no.

Pero las diferencias entre los seis valores de referencia son apreciables, van de 2,3 puntos a 2,8. El elegido por la Comisión (promedio sin ponderar de los tres mejores) estaba, en agosto, en medio de la escala: 2,6. Las variaciones no son despreciables cuando se discute la décima. Y sobre todo, el reconocimiento de que el criterio es interpretable puede abrir aún vías adicionales para su relectura.

El Informe da cuenta concreta de los resultados de la convergencia en 1996 según todos los criterios de Maastricht:

Inflación. En agosto lo cumplían diez países. Portugal y Reino Unido se acercaban, con diferenciales inferiores a medio punto. España, con el 3,9%, mantenía una distancia de 1,1 Italia, de 2,3 y Grecia de 5,8.

Déficit. Este año mejorarán todos, salvo Alemania. Holanda se unirá a los tres cumplidores del 3% (Dinamarca, Irlanda y Luxemburgo). Bélgica y Finlandia se situarán entre el 3% y el 3,5%. Alemania y Francia, por debajo del 4,5%. España, en el 4,4%. Quienes más esfuerzos han hecho entre 1993 y 1996, reduciendo el déficit más de cuatro puntos, son Bélgica, Grecia, Finlandia y Suecia. Les siguen, con dos puntos o más, Dinamarca, España, Francia, Italia, Portugal y el Reino Unido.

Deuda. Cumplirán el tope del 60% Francia, Luxemburgo y Reino Unido. También Irlanda (por su decrecimiento tendencial). Mejorarán Irlanda, Bélgica, Dinamarca, Grecia, Holanda, Italia, Portugal y Suecia. Empeorará España.

Tipos de cambio. Estables. España y Portugal no cumplen los dos años de estabilidad porque devaluaron en marzo de 1995. Siete países sí los cumplen, y dentro del SME: Bélgica, Dinamarca, Alemania, Francia, Irlanda, Luxemburgo y Holanda. Austria y Finlandia han entrado hace poco en el SME. Otros cuatro (Grecia, Italia, Suecia y Reino Unido) no forman parte de él.

Tipos de interés a largo. (techo de dos puntos sobre los tres mejores, que mide el carácter duradero de la convergencia). Once países cumplían en el mes de agosto el criterio y cuatro lo incumplían: España, Grecia, Italia y Portugal.

[El crecimiento de la economía española en el segundo trimestre del presente año, que se refleja en el 1,9% en el PIB, se ha basado en el incremento de la demanda interna privada, tanto en el consumo como en la inversión, según la Síntesis de Indicadores Básicos hecha pública ayer por el Ministerio de Economía, que para el segundo trimestre espera que sea en torno al 2,2%. La actividad económica se encuentra en una tendencia alcista, según el Ministerio de Economía, superando la desaceleración de 1995, gracias a que el consumo privado ha crecido el 2,3% respecto al trimestre anterior (1,9% en relación a igual periodo del año anterior), mientras que la inversión privada (formación bruta de capital fijo) aumentó el 1,6% en el segundo trimestre respecto a los tres meses anteriores.]

Archivado En