SANIDAD

Reguladas la publicidad y promoción de los 'productos milagro'

El Consejo de Ministros aprobó ayer el Real Decreto sobre productos milagro, de acuerdo con una propuesta del Senado. La norma trata de garantizar la salud y seguridad de los consumidores, "estableciendo prohibiciones y limitaciones concretas de publicidad y promoción comercial de productos y métodos que se ofertan como panaceas dé salud. Atribuye, en general, a las autoridades sanitarias el control de su publicidad y promoción, y contempla su intervención para evitar riesgos para la salud. El objetivo, según el Ministerio de Sanidad, es "impedir la publicidad y promoción abusiva que bo...

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El Consejo de Ministros aprobó ayer el Real Decreto sobre productos milagro, de acuerdo con una propuesta del Senado. La norma trata de garantizar la salud y seguridad de los consumidores, "estableciendo prohibiciones y limitaciones concretas de publicidad y promoción comercial de productos y métodos que se ofertan como panaceas dé salud. Atribuye, en general, a las autoridades sanitarias el control de su publicidad y promoción, y contempla su intervención para evitar riesgos para la salud. El objetivo, según el Ministerio de Sanidad, es "impedir la publicidad y promoción abusiva que bordea o infringe la veracidad y que utiliza técnicas de inducción al consumo de productos sin garantías técnicas y sanitarias, que crean demandas artificiales".El decreto incluye la prohibición general de la publicidad que atribuya efectos preventivos o terapéuticos que no estén respaldados por suficientes pruebas técnicas o científicas acreditadas y expresamente reconocidas por la Administración Sanitaria del Estado. Prohíbe además la publicidad que haga referencia a la prevención o curación de enfermedades transmisibles; la que pretenda sustituir el régimen de alimentación o nutrición; la que atribuya a los productos cosméticos propiedades distintas de las reconocidas en su normativa; y la que sugiera o indique que el uso de estos productos potencia el rendimiento físico, psíquico, deportivo o sexual.

Prohíbe a los profesionales sanitarios y a sus asociaciones y corporaciones amparar esta publicidad y se exige autorización sanitaria para hacer promoción de los centros de belleza, adelgazamiento y tratamiento o desarrollo físico 0 estético.

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