Matutes querría para Cuba las libertades que ve en Marruecos

El ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, señala en una entrevista que publica la revista Cambio 16 que "daría dinero para que en Cuba hubiera un respeto a las libertades y a los derechos humanos similar al que hay en Marruecos". Matutes admite que en el país magrebí "hay problemas de respeto a los derechos humanos", pero razona que Marruecos, en cualquier caso, "constituye un ejemplo que ya quisiera yo que siguieran algunos de sus vecinos". El ministro hace también un repaso a la posición española y de la Unión Europea con respecto a Cuba. En este sentido afirma: "Colaboraremos ...

El ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, señala en una entrevista que publica la revista Cambio 16 que "daría dinero para que en Cuba hubiera un respeto a las libertades y a los derechos humanos similar al que hay en Marruecos". Matutes admite que en el país magrebí "hay problemas de respeto a los derechos humanos", pero razona que Marruecos, en cualquier caso, "constituye un ejemplo que ya quisiera yo que siguieran algunos de sus vecinos". El ministro hace también un repaso a la posición española y de la Unión Europea con respecto a Cuba. En este sentido afirma: "Colaboraremos con Fidel Castro si hace reformas".Sobre Cuba, y fundamentalmente sobre la ley norteamericana Helms-Burton, que pretende castigar a las empresas internacionales que mantengan negocios en la isla caribeña, Matutes confirma su opinión contraria a la postura de Estados Unidos: "La táctica es equivocada, por que Cuba es un régimen que no solamente no funciona y no tiene libertades, sino que además no es capaz de producir bienestar material para sus ciudadanos". El ministro español dice que la Unión Europea sostiene sobre Cuba una política "de suma flexibilidad y benevolencia" y recuerda que lo único que se le ha reclamado a Castro es "un mínimo gesto, como sacar de las cárceles a los disidentes".

Matutes crítica la actitud del anterior Gobierno socialista hacia Cuba, porque entiende que "trece años de una política de no condicionar nada no ha llevado a ninguna reforma", y concluye que el PP, y el actual Ejecutivo que preside José María Aznar, están a favor de una transición pacífica en la isla: "No queremos la paz a cualquier precio. Queremos la paz y la transición".