OPERACIÓN UVAS DE LA IRA

Israel destruye una ambulancia con civiles

La muerte de dos mujeres y cuatro niñas libanesas en un bombardeo israelí catapultó la nueva crisis en Oriente Próximo a un nivel donde todo era posible, menos hablar de una posible victoria militar de Israel después de tres días de hostilidades. Según detallados informes de Beirut, uno de los helicópteros artillados de la Fuerza Aérea israelí que se lanzaron nuevamente sobre las aldeas libanesas del sur destruyó una ambulancia que transportaba a 14 civiles a 50 metros de un puesto de control de la ONU en Amriya, donde están estacionados los cascos azules de las islas Fiyi. Hezbolá y las organ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La muerte de dos mujeres y cuatro niñas libanesas en un bombardeo israelí catapultó la nueva crisis en Oriente Próximo a un nivel donde todo era posible, menos hablar de una posible victoria militar de Israel después de tres días de hostilidades. Según detallados informes de Beirut, uno de los helicópteros artillados de la Fuerza Aérea israelí que se lanzaron nuevamente sobre las aldeas libanesas del sur destruyó una ambulancia que transportaba a 14 civiles a 50 metros de un puesto de control de la ONU en Amriya, donde están estacionados los cascos azules de las islas Fiyi. Hezbolá y las organizaciones radicales palestinas Hamás y Yihad Islámica (Guerra Santa) anunciaron ayer el lanzamiento de ataques suicidas en Israel.

Más información

"El vehículo blanco, que estaba perfectamente identificado con la insignia de la asociación islámica de scouts, saltó como una bola de fuego hacia la vera del camino", dijo uno de los periodistas extranjeros que fue testigo del ataque. "La potencia de la explosión lanzó la ambulancia hacia una huerta vecina. En su interior vimos a dos mujeres carbonizadas. A su lado yacían niñas mutiladas", dijo.Israel declaró inmediatamente que en la ambulancia viajaban combatientes de Hezbolá, la aguerrida fuerza proiraní que ha lanzado su lucha contra la ocupación israelí de Líbano al primer plano de la agenda política en la región. Imágenes de la televisión libanesa no incluían el menor rastro de guerrilleros en el lugar del ataque.

Las seis muertes de ayer elevan a 25 el número de libaneses a que han perdido la vida desde que Israel lanzó sus más atrevidas operaciones en Líbano desde la invasión de 1982. La más joven de las víctimas tenía tres años de edad. "Eran civiles que trataban de huir del sur", explicó un portavoz de la ONU recordando el ultimátum israelí a los habitantes de 48 pueblos y aldeas libanesas para que abandonaran sus hogares "a fin de evitar muertes inútiles".

Israel lanzó ayer un nuevo ultimátum, esta vez conminando a los 150.000 habitantes de Tiro a que que evacuaran la ciudad antes de las nueve de la mañana de hoy. La Marina israelí ya ha tomado posiciones ante este y otros puertos libaneses. El Gobierno libanés aconsejó ayer a los habitantes de Beirut que permaneciesen en sus casas ante posibles nuevos bombardeos israelíes, mientras su primer ministro, Rafik Hariri, se trasladaba a Siria para discutir con el presidente Hafez al Assad la manera de detener la Operación Uvas de la Ira, denominación dada por el Ejército israelí a su ofensiva.

Tres días después de que el primer ministro israelí, Simón Peres, se embarcase en su más ambiciosa empresa militar a fin de intimidar a Hezbolá, los estrategas israelíes tenían poco de qué jactarse. La formidable ofensiva aérea y la acción de su artillería no ha conseguido disuadir a los guerrilleros. Ayer, una nueva andanada de cohetes Katyusha se estrelló en el norte de Israel, causando más susto que daños. Nuevos ataques israelíes se sucedieron a la caída de la tarde. Según la policía libanesa, el Ejército israelí bombardeó de forma sostenida varias localidades del sur de Líbano. Hezbolá, por su parte, anunció que había lanzado un tercer ataque con Katyusha contra el norte de Israel.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Mientras que el Gobierno israelí volvió a jurar que acabará con Hezbolá, el secretario general de la organización, Hasan Nasralah, decretó ayer la movilización general de sus comandos suicidas "para vengar la muerte de mujeres y niños".

Archivado En