La debilidad del consumo y de la inversión reducen el crecimiento al 2%

El crecimiento de la economía española en el primer trimestre de 1996 se ha estancado en el 2% en términos interanuales, según fuentes oficiales y privadas. Este crecimiento moderado, que se ajusta a las previsiones del Gobierno, según las cuales la tasa de crecimiento no se reactivará hasta el segundo semestre de este año, está acompañado de un fuerte descenso de la inversión. Entre enero y marzo, la inversión sólo ha crecido a tasas del 4,5% aproximadamente, la mitad que en el primer trimestre del año pasado, debido al descenso de la inversión en construcción, afectada por el mal tiempo.
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El crecimiento de la economía española en el primer trimestre de 1996 se ha estancado en el 2% en términos interanuales, según fuentes oficiales y privadas. Este crecimiento moderado, que se ajusta a las previsiones del Gobierno, según las cuales la tasa de crecimiento no se reactivará hasta el segundo semestre de este año, está acompañado de un fuerte descenso de la inversión. Entre enero y marzo, la inversión sólo ha crecido a tasas del 4,5% aproximadamente, la mitad que en el primer trimestre del año pasado, debido al descenso de la inversión en construcción, afectada por el mal tiempo.

La atonía económica se agudiza por el escaso pulso del consumo, totalmente paralizado, que no acaba de remontar las modestas tasas del 1,6% del último trimestre de 1995. Además, crece el escepticismo sobre las posibilidades de recuperación de la economía alemana durante 1996, una de las condiciones para que España vuelva a tasas de crecimiento del 3% a partir de julio.