Crítica:JAZZ

Altísima fiebre creativa

Kenny Garrett QuartetLos inolvidables Woody Shaw y Art Blakey fueron, por este orden, los primeros en advertir las nada usuales hechuras del talento de Kenny Garrett (Detroit, 1960). Poco después, Miles Davis corroboraría tan certeras intuiciones y le incluiría en la que a la postre resultaría ser su última banda. Los titubeantes pasos iniciales de Garrett como responsable de un grupo propio acusaban la pérdida macabramente simultánea de sus mentores, pero el saxofonista ha sabido rehacerse y ahora se expresa con el gesto decidido de quien, ha personalizado las enseñanzas de sus maestro...

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Kenny Garrett QuartetLos inolvidables Woody Shaw y Art Blakey fueron, por este orden, los primeros en advertir las nada usuales hechuras del talento de Kenny Garrett (Detroit, 1960). Poco después, Miles Davis corroboraría tan certeras intuiciones y le incluiría en la que a la postre resultaría ser su última banda. Los titubeantes pasos iniciales de Garrett como responsable de un grupo propio acusaban la pérdida macabramente simultánea de sus mentores, pero el saxofonista ha sabido rehacerse y ahora se expresa con el gesto decidido de quien, ha personalizado las enseñanzas de sus maestros, y los añora, aunque ya no necesita su protección.Lo escuchado durante la primera hora del pase de noche de su presentación madrileña merece figurar en la selecta nómina de lo memorable. Torrencial y enfático, intenso hasta límites casi sobrenaturales, Garrett liberó todas las espitas de su inmensa reserva de ideas y sopló como Poseído por una altísima fiebre creativa.

Kenny Garrett (saxo alto soprano y

sintetizador),Kenny Kirkland (piano y sintetizador), Nat Reeves (contrabajo), Jeff Watts (batería). Círculo de Bellas Artes. Madrid, 12 de mayo.

Fuera cual fuese la densidad, la textura o el volumen, la emoción, en su sentido más visceral y primitivo, lo, impregnaba todo. Tras la apoteosis anticipada, la primera balada sonó como el mismísimo silencio. El depuradísimo sonido de su saxo soprano se relajó después sobre el difuso encanto del hip bop.

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