Un personaje a la medida

Robert Benton, de 62 años, se dio cuenta en el acto, cuando leyó la novela de Richard Russo, de que Paul Newnian era el actor perfecto para representar el personaje del albañil marginal y desubicado en la pequeña ciudad donde se desarrolla la acción. Explicó Benton a la prensa ayer en Berlín que él personalmente odia la nieve y no le cabía en la cabeza la idea de hacer una película con un niño y un perro, porque cree que no se puede dirigir a niños o a perros, pero el personaje que encarna Newman le convenció y no dudó de que estaba hecho a la medida del gran actor. Durante el rodaje se...

Robert Benton, de 62 años, se dio cuenta en el acto, cuando leyó la novela de Richard Russo, de que Paul Newnian era el actor perfecto para representar el personaje del albañil marginal y desubicado en la pequeña ciudad donde se desarrolla la acción. Explicó Benton a la prensa ayer en Berlín que él personalmente odia la nieve y no le cabía en la cabeza la idea de hacer una película con un niño y un perro, porque cree que no se puede dirigir a niños o a perros, pero el personaje que encarna Newman le convenció y no dudó de que estaba hecho a la medida del gran actor. Durante el rodaje se produjo la mayor tempestad de nieve en medio siglo, pero esto sirvió para darle a la película un tono de tremenda melancolía. Benton dice que sin la nieve la secuencia de un entierro no se habría: logrado en esa forma. A Newman le conocía Benton desde hace 20 años. Entonces se hicieron amigos y siempre comentaban la posibilidad de hacer una película juntos.El carácter del personaje era ideal para Newman, que incluso lo mejora en la película. Paul Newman sabe dar el toque de simpatía a los personajes que es tán por los suelos, como el de Nobody´s foll.

Relató Benton la anécdota del inicio del rodaje, cuando Bruce Willis le dijo a Newman que sería su segunda película juntos. Newman no podía recordar haber filmado jamás con Winis, quien al día siguiente llegó con un vídeo de El veredicto. En un instante de esta película Willis asoma un momento como extra detrás del Newman que hacía de abogado.

Un papel destacado en el rodaje le correspondió a Jessica Tandy, quien murió al poco tiempo. Habían preparado una roulotte para que reposara. Tandy no lo hacía y se negaba a recibir un trato especial. "Era divertida, encantadora y chistosa. Su mayor aportación como actriz fue demostrar al equipo que estaba mejor de salud de lo que en realidad estaba. Ése fue su gran papel".