Las tasas de las matrículas se duplicarán en 10 años

La Universidad ha de entrar en el siglo XXI con otra cara. No habrá café para todos. Los centros universitarios deberán competir entre sí: los mejores recibirán más dinero público y los peores administrarán. la miseria. Los mejores profesores tendrán más recursos y el 50% de los estudiantes podrá disfrutar de becas o acceder a préstamos blandos avalados por el Estado. También será más caro estudiar en la universidad: la matrícula cubrirá el 30% del coste real de la carrera (ahora es el 17%). Todo ello está recogido en el Informe sobre la financiación de las Universidades que debate ...

La Universidad ha de entrar en el siglo XXI con otra cara. No habrá café para todos. Los centros universitarios deberán competir entre sí: los mejores recibirán más dinero público y los peores administrarán. la miseria. Los mejores profesores tendrán más recursos y el 50% de los estudiantes podrá disfrutar de becas o acceder a préstamos blandos avalados por el Estado. También será más caro estudiar en la universidad: la matrícula cubrirá el 30% del coste real de la carrera (ahora es el 17%). Todo ello está recogido en el Informe sobre la financiación de las Universidades que debate hoy en Salamanca el Consejo de Universidades. El objetivo es que, en 10 años, el presupuesto destinado a la enseñanza superior pase del 0,9% del PIB al 1,5%.El informe comenzó a elaborarse por una comisión de técnicos como consecuencia del conflicto generado por el incremento de las tasas de matrícula para el curso 1993 / 94. El documento, en el que han colaborado representantes de todas las comunidades autónomas, propone el inicio de una "nueva etapa" en el desarrollo del sistema universitario español, en la que "deben cambiar las prioridades de la política universitaria". El documento considera un reto fundamental "conseguir un incremento generalizado de la calidad de la enseñanza universitaria" y alcanzar "una mayor eficiencia en el uso de los recursos".

Potenciar la especialización de las universidades y facilitar la movilidad de los estudiantes, con fórmulas de distrito compartido, son algunas de las propuestas que formula el informe, en el que se realiza una proyección de la evolución de la población estudiantil, las necesidades económicas y las fórmulas de financiación para los próximos 10 años. Así, se prevé que el máximo número de universitarios se registre entre los años 1996 y 1998, con 1.600.000 estudiantes, para que la tendencia se invierta a partir de entonces y, en el 2004, la cifra sea similar a la del curso 1992-1993, cercana a 1.300.000 alumnos.

Incrementar en más de un 40% los recursos destinados a los estudios postsecundarios de forma que se pase del 0,9% del producto interior bruto (PIB) actual al 1,5% en el 2003, es una propuesta del informe, con la intención de equiparar los indicadores a los que se registran en los países europeos desarrollados. Este incremento no modificará, sin embargo, el porcentaje de participación de la finaciación pública y privada de las universidades que se produce hoy (cerca de un 80% y un 20%, respectivamente). El documento deja claro que hay que potenciar los estudios postsecundarios no universitarios, como la Formación Profesional de grado superior, en la que se parte de cero y será necesario invertir muchos más recursos.

Por lo que se refiere a la matrícula que deben pagar los alumnos, el informe propugna que se pase del 17% del coste real de la carrera que ahora paga cada estudiante al 30%. Paralelamente, propone pasar del 20% de estudiantes que actualmente dispone de becas para llegar al 50%, lo que supondrá incrementar en un 267% el dinero para tal fin, situándose en el 2000 en 265.000 millones de pesetas. De esta cantidad, la partida destinada a becas en el 2.003 será de unos 140.000 millones. Otros 40.000 millones se destinarán a avalar préstamos a los estudiantes. El informe propone generalizar el distrito único en las comunidades autónomas y crear distritos, interterritoriales.