Crítica:JAZZ

Con los brazos abiertos

El concierto podría haber durado toda la noche. A lo largo de su carrera, Pedro Iturralde ha interpretado el repertorio clásico completo para saxo y ha improvisado sobre un interminable catálogo de ritmos de muy distintos orígenes. Para aspirar a matrícula de honor en polifacetismo, incluso ha cantado canciones francesas, ¡en francés! Resultaba, pues, una temeridad programar un concierto recopilatorio de sus talentos, y se optó por presentar al injustamente olvidado Iturralde compositor.Un cuarteto de alumnos suyos, dirigido por el magnífico Joaquín Franco al soprano, estrenaron la obra ...

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El concierto podría haber durado toda la noche. A lo largo de su carrera, Pedro Iturralde ha interpretado el repertorio clásico completo para saxo y ha improvisado sobre un interminable catálogo de ritmos de muy distintos orígenes. Para aspirar a matrícula de honor en polifacetismo, incluso ha cantado canciones francesas, ¡en francés! Resultaba, pues, una temeridad programar un concierto recopilatorio de sus talentos, y se optó por presentar al injustamente olvidado Iturralde compositor.Un cuarteto de alumnos suyos, dirigido por el magnífico Joaquín Franco al soprano, estrenaron la obra Memorias, una mirada retrospectiva a las primeras salidas al extranjero. Ya de entonces debe datar la intuición del navarro para encerrar en las partituras un delicioso candor de inequívoca raíz popular. Las melodías podían tararearse casi al instante; pegadizas pero no triviales y se deslizaban sobre arreglos atentísimos a la dinámica.

Homenaje a Pedro Iturralde

Cuarteto de saxófonos, Modem Sax Quartet, Big Band Asociación de Músicos de Madrid. Directores: Miguel Ángel Blanco y Javier Iturralde. Solistas: Donna Hightower, Pedro Iturralde, Larry Monroe y Gregory Hopkins. Madrid. Auditorio Nacional. 1 de diciembre.

El Modern Sax Quartet sumó fuerzas con la primera formación para exponer a ocho voces la Suite helénica, basada en motivos populares griegos, emparentados con el flamenco a través de la escala llamada gitana. Y de hermandades culturales próximas y lejanas parecen salpicados los pentagramas del saxofonista.

Tras el descanso, la Big Band de la Asociación de Músicos de Madrid realzó la bondad de los refinados arreglos escritos por dos viejos amigos del homenajeado, el saxofonista Larry Monroe y el trompetista Gregory Hopckins, y la calidad de voz que todavía acompaña a la gran Donna Hightower, llegada a Madrid desde Estados Unidos exclusivamente para participar en el acontecimiento. La deficiente amplificación tampoco pudo con la profundidad del Martinete y la emoción del Recuerdo a Turina, breves muestras de una fértil comnunión entre flamenco y jazz que Iturralde ya atisbó en los años sesenta. ¿Para cuándo una reunión en la cumbre entre el navarro, Jorge Pardo, Chano Domínguez, Paco de Lucía y otros lúcidos seguidores de aquella intuición temprana?

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