Eutanasia, aborto y pena de muerte

La vida, la muerte y el sexo, estarán mañana en las urnas en algunos Estados que celebran, coincidiendo con las elecciones presidenciales, referendos de ámbito local o estatal. La eutanasia en California, el aborto en Maryland y la pena de muerte en Washington capital, serán objeto de consulta. Pero siendo éstos asuntos complejos y delicados no han conseguido suscitar tanta controversia como el del referéndum sobre la homosexualidad que se realizará en Oregón y Colorado.Los ciudadanos de Oregón deberán decidir si enmiendan la Constitución de su Estado para introducir un párrafo que define la h...

La vida, la muerte y el sexo, estarán mañana en las urnas en algunos Estados que celebran, coincidiendo con las elecciones presidenciales, referendos de ámbito local o estatal. La eutanasia en California, el aborto en Maryland y la pena de muerte en Washington capital, serán objeto de consulta. Pero siendo éstos asuntos complejos y delicados no han conseguido suscitar tanta controversia como el del referéndum sobre la homosexualidad que se realizará en Oregón y Colorado.Los ciudadanos de Oregón deberán decidir si enmiendan la Constitución de su Estado para introducir un párrafo que define la homosexualidad como una conducta "anormal, equivocada, antinatural y perversa". De aprobarse, la Coalición Cristiana, una organización de la derecha republicana, podría apoyar medidas para despedir a todos los homosexuales que ocupen puestos públicos como maestros, policías, bomberos o funcionarios.

El movimiento homosexual, muy fuerte y activo en Estados Unidos, se ha movilizado para impedir que prosperen ese tipo de iniciativas y ha lanzado a sus seguidores a una intensa campaña contra el Partido Republicano, en el que tiene una fuerte influencia el movimiento cristiano de Pat Robertson o los ultraconservadores de Patrick Buchanan, quien disputó la nominación del partido a Bush.

Los republicanos han intentado, sin éxito, situar asuntos de orden moral entre las prioridades de los electores, más preocupados por su situación económica que por la salvación de sus almas. El debate sobre los valores familiares descarriló cuando el vicepresidente Dan Quayle hizo un desafortunado comentario sobre la serie de televisión Murphy Brown, uno de los programas más populares.

Pero la campaña de los grupos ultras contra el Partido Demócrata no ha desfallecido y han llegado a poner anuncios en los grandes diarios advirtiendo que votar por los demócrata es pecado.