Los ministros de 22 países piden a sus Gobiernos prioridad para la educación

Los ministros de Educación de 22 países iberoamericanos firmaron ayer, en la Expo de Sevilla, la Declaración de Guadalupe, en la que piden a sus respectivos jefes de Estado que la educación se convierta en "un objeto prioritario de la política, con las consecuencias presupuestarias que de esto se derivan".

Los ministros, reunidos bajo la presidencia del titular de Educación español, Javier Solana, primero en Guadalupe (Cáceres) y luego en Sevilla, han considerado la producción de programas de televisión educativos a través del Hispasat, la organización de un sistema de intercambios univ...

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Los ministros de Educación de 22 países iberoamericanos firmaron ayer, en la Expo de Sevilla, la Declaración de Guadalupe, en la que piden a sus respectivos jefes de Estado que la educación se convierta en "un objeto prioritario de la política, con las consecuencias presupuestarias que de esto se derivan".

Los ministros, reunidos bajo la presidencia del titular de Educación español, Javier Solana, primero en Guadalupe (Cáceres) y luego en Sevilla, han considerado la producción de programas de televisión educativos a través del Hispasat, la organización de un sistema de intercambios universitarios entre profesores y posgraduados y la creación de un programa de reforma de la educación técnica y profesional, como algunos de los puntos que deberán impulsarse desde la cumbre de jefes de Estado de Iberoamérica que se celebrará el mes próximo en Madrid.El ministro español destacó ayer que "Guadalupe supone el inicio de una forma de actuar conjunta y nueva". Solana añadió que la educación no es una política sectorial más, sino "el corazón de la política".

La lucha contra la desigualdad y el progreso de los países menos desarrollados, a través de la mejora en la educación, han sido dos de los argumentos más esgrimidos por todos los participantes. Paralelamente a las propuestas que los titulares de Educación piensan elevar a sus Gobiernos, la Declaración de Guadalupe enumera también una serie de acciones para conseguir unos objetivos comunes, como el diseño de estrategias para la transformación de los sistemas educativos, el apoyo a la democratización de la enseñanza, la vinculación de la educación con los procesos socioeconómicos, el apoyo a los procesos de integración regionales y la cooperación en la modernización administrativa educativa.

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