Centenares de pesqueros bloquean los puertos en el litoral cantábrico

Varios centenares de pesqueros de bajura bloquearon a lo largo del día de ayer puertos de la cornisa cantábrica exigiendo que se presione a Francia para que deje de incumplir los cupos de anchoa para la exportación asignados a ese país. El bloqueo, iniciado por los pescadores vascos de bajura, se extendió durante el día a los puertos de Bilbao, Pasajes (Guipúzcoa), Santander, Gijón y La Coruña en una acción que impidió el tránsito de mercantes y redujo considerablemente las actividades en los muelles.

El bloqueo se mantenía anoche en los puertos citados y sólo se había levantado parcial...

Varios centenares de pesqueros de bajura bloquearon a lo largo del día de ayer puertos de la cornisa cantábrica exigiendo que se presione a Francia para que deje de incumplir los cupos de anchoa para la exportación asignados a ese país. El bloqueo, iniciado por los pescadores vascos de bajura, se extendió durante el día a los puertos de Bilbao, Pasajes (Guipúzcoa), Santander, Gijón y La Coruña en una acción que impidió el tránsito de mercantes y redujo considerablemente las actividades en los muelles.

El bloqueo se mantenía anoche en los puertos citados y sólo se había levantado parcialmente en Santander para permitir la entrada del ferry Bretagne, procedente de Plymouth (Reino Unido), que llevaba retenido desde mediodía con 1.340 pasajeros a bordo.Los pescadores continuaban la protesta a pesar de que la Comunidad Europea anunció ayer el cierre oficial de las pesquerías de anchoa para la flota francesa en el Golfo de Vizcaya.

Incumplimiento

La protesta, según el presidente de la Cofradía de Pescadores de Hondarribia, Esteban Olaizola, se justifica por el reiterado incumplimiento de los cupos de importación de anchoa (3 millones de kilos al año) asignados por la CE a la flota francesa. Olaizola aseguró ayer que la importanción a España de anchoa francesa sobrepasó el pasado 24 de marzo los 4 millones de toneladas.

En su opinión, los requerimientos de las autoridades comunitarias para atenerse a los límites de importación fijados son sistemáticamente ignorados por los exportadores franceses.

Ante el requirimiento de las autoridades comunitarias, los responsables franceses respondieron indicando que la exportación de anchoa a España había quedado paralizada pero, según Olaizola, la entrada de anchoa procedente de ese país continuó a lo largo del año hasta contabilizar los 12 millones de kilogramos. El presidente de la Cofradía de Pescadores de Hondarribia considera que tales abusos amenazan la superviviencia misma de la flota de bajura vasca y se teme que este año pueden repetirse los mismos excesos. El bloqueo fué criticado por Antoni Gutierro, presidente del puerto de Pasajes, que lo considera desproporcionado y mal orientado, en la medida en que perjudica a los intereres comerciales de los puertos españoles.

En Cantabria, el puerto de Santander permaneció ayer desde las 9.00 horas bloqueado por los pescadores de bajura. Una veintena de embarcaciones se situó en la canal de acceso al puerto, algunas de ellas abarloadas y otras conectadas entre sí por una larga maroma.

La concentración había sido decidida el sábado pasado en el curso de una reunión celebrada en Santander a la que asistieron los presidentes de las cofradías de Galicia, Asturias, Vizcaya y Guipúzcoa, quienes decidieron sitiar ayer los puertos del Norte como primera medida de presión ante la Administración para protestar por la actitud de los pescadores franceses durante la actual campaña de la anchoa.

Ferry atrapado

Entre los barcos afectados ayer en su salida y entrada en este puerto se encontraba el ferry Bretagne, que cubre la línea regular, dos veces por semana, entre Plymouth (Reino Unido) y Santander. Ante la imposibilidad de penetrar en la bahía, el Bretagne, con 1.340 pasajeros, 11 camiones y 432 vehículos a bordo, hubo de fondear poco antes del mediodía en el abra de El Sardinero hasta que, pasadas las nueve y media de la noche, los pescadores decidieron franquearles el paso.

En la estación marítima de Santander esperaban la arribada de la motonave para embarcar rumbo a Plymouth 170 pasajeros y 135 vehículos.