La 'cumbre de la coca' pide ayuda a Europa y Asia para combatir la droga

EE UU, México, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Venezuela, firmarán hoy en San Antonio (Tejas) un acuerdo en el que se pide la colaboración de Europa y Asia en su lucha contra el narcotráfico. El presidente peruano, Alberto Fujimori, criticó ayer la ambigüedad de los acuerdos y recordó que el problema de la droga no se resolverá "con represión, sino con la implantación de economías alternativas al cultivo de la coca".

Los países participantes en esta segunda cumbre contra el narcotráfico están de acuerdo en coordinar la guerra contra el tráfico y el blanqueo de dinero. También ...

EE UU, México, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Venezuela, firmarán hoy en San Antonio (Tejas) un acuerdo en el que se pide la colaboración de Europa y Asia en su lucha contra el narcotráfico. El presidente peruano, Alberto Fujimori, criticó ayer la ambigüedad de los acuerdos y recordó que el problema de la droga no se resolverá "con represión, sino con la implantación de economías alternativas al cultivo de la coca".

Los países participantes en esta segunda cumbre contra el narcotráfico están de acuerdo en coordinar la guerra contra el tráfico y el blanqueo de dinero. También coinciden en que se deben ampliar las campañas de prevención del consumo de drogas, crear mecanismos para incautar los bienes de los narcotraficantes, ayudar al intercambio de pruebas judiciales sobre los traficantes y abogar por un compromiso mundial contra el narcotráfico, además de apoyar el desarrollo alternativo para erradicar los cultivos de coca en la altiplanicie andina.El acuerdo final reconoce la preocupación de los países que han acudido a Tejas al observar la expansión de la coca hacia Europa y Asia y exhorta a los países de esos dos continentes a que estrechen la cooperación en la lucha contra las drogas.

Uno de los firmantes del compromiso de San Antonio es Perú, país que junto a Bolivia y Colombia sigue procesando el 90% de la producción mundial de hoja de coca. Alberto Fujimori, el presidente peruano, declaró ayer que quiere evitar a toda costa que su país se convierta en un "nuevo Vietnam".

"El problema de la droga es mundial, no regional, y sólo se atajará con programas de economía alternativa y no con represión", dijo el presidente peruago, quien reconoció a EL PAÍS que las informaciones que apuntaban la posibilidad de que no iba a viajar a San Antonio por su desacuerdo con EE UU eran ciertas.

"No estoy enfadado, me remito a la realidad, y ésta es que después de 10 años de represión, la producción de coca no se ha erradicado; no podemos caer en esquemas que han fracasado, hemos de solidarizarnos con los 250.000 agricultores peruanos que viven de la coca dándoles alternativas, no reprimiéndoles".

Fujimori, la voz más clara de cuantas se han oído en San Antonio, se quejó de que el Congreso norteamericano recortará las ayudas a Perú por violaciones de los derechos humanos y por acusaciones de corrupción en el seno de sus fuerzas armadas.

"Hay corrupción en todos los niveles, entre los militares y los policías peruanos, pero también la hay en la DEA (Agencia Federal Antinarcóticos de EE UU)", dijo Fujimori, quien cree que Estados Unidos no entienda el problema de Perú.