"Si no es de tierra, ¿de qué hablamos?"

El ajetreo de los últimos días ha hecho escasa mella en la oronda figura de Nabil Shaat, Este hombre de confianza de Yasir Arafat se muestra satisfecho del paso dado en Madrid y, a pesar de la discreción con que se ha movido, no ha ocultado su cometido. "Represento al Gobierno palestino", declaró ayer a EL PAÍS en la misión diplomática de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), cuyo nombre no pronunció, sin embargo, ni una sola vez.Un Shaat relajado y sonriente explicó, apenas elausurada la primera fase de la Conferencia de Paz, que estaba "haciendo todo lo posible para apoyar a...

El ajetreo de los últimos días ha hecho escasa mella en la oronda figura de Nabil Shaat, Este hombre de confianza de Yasir Arafat se muestra satisfecho del paso dado en Madrid y, a pesar de la discreción con que se ha movido, no ha ocultado su cometido. "Represento al Gobierno palestino", declaró ayer a EL PAÍS en la misión diplomática de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), cuyo nombre no pronunció, sin embargo, ni una sola vez.Un Shaat relajado y sonriente explicó, apenas elausurada la primera fase de la Conferencia de Paz, que estaba "haciendo todo lo posible para apoyar a la delegación palestina y para que este proceso tenga éxito". El enviado de Arafat dio a su presencia en Madrid un carácter institucional -"nada que tenga que ver con el pueblo palestino, su autodeterminación o su futuro escapa a nuestro interés"- y agradeció la "exquisita imparcialidad de España".

Pregunta. ¿Qué ha significado la Conferencia de Madrid para los palestinos?

Respuesta. Se ha tratado de una oportunidad histórica. Los palestinos de todas las partes han estado representados aquí, en Madrid, cara a cara con Israel -que ocupa su país-, y con la posibilidad de exponer su causa ante toda la comunidad internacional. Es una ocasión histórica porque durante mucho tiempo se ha negado al pueblo palestino, se le ha mantenido ausente e ignorado, a la vez que bajo la ocupación y en el exilio, y el núcleo del asunto son sus derechos y su tierra.

P. ¿En qué se ha avanzado hacia la paz?

R. De hecho, no hemos obtenido progresos en el sentido de acciones que hagan realidad la paz. Ha sido simplemente una ceremonia de apertura de ese proceso potencialmente histórico. Cabe la posibilidad de que el proceso resulte abortado. Como ha podido usted ver, Shamir abandonó la reunión tras soltar su bomba de relojería de esta mañana [por ayer], que provocó una, nueva reacción de nuestros hermanos sirios. Israel no quiere permanecer en Madrid y realiza fuertes presiones contra la continuación de las conversaciones en España. Nosotros, sin embargo, esperamos poder aprovechar esta,ocasión. Hemos traído todos nuestros medios, todos nuestros consejeros, hasta nuestra biblioteca está aquí.

P. ¿Cree entonces que tendrán que esperar un cambio de Gobierno en Israel para poder dialogar?

R. No. Deseamos seguir adelante. Nosotros nos negamos a que Israel elija nuestro Gobierno. Por tanto, tampoco podemos imponer qué Gobierno israelí preferimos. No es nuestro problema. Por supuesto, nos gustaría uno más abierto, más interesado en la paz, pero sea cual sea el Gobierno israelí, queremos continuar este proceso.

P. ¿Cómo van a desbloquear esta situación en la que ustedes hablan de "paz por territorios" y los israelíes descartan cualquier compromiso de ese tipo?

R. El regreso a nuestra tierra bajo la legalidad internacional debería hacerse sin pedir un premio por ello. La resolución 242 dice que es inadmisible la adquisicíón de tierra por medio de la guerra. En la guerra del Golfo no se dio ningún premio a Irak por la evacuación de Kuwait. Nosotros, a pesar de todo, hemos aceptado discutir de qué forma se nos debe devolver la tierra y bajo qué condiciones, pero los israelíes siguen sin querer hablar de esto. Y, si no es de tierra, ¿de qué hablamos?

Su fórmula de paz por paz da por hecho que no se discutan sus adquisiciones de tierra previas, y sólo promete que no hará nuevas conquistas. De hecho, Shamir, en su discurso, atribuyó a Israel 28.000 kilómetros cuadrados de extensión, y eso incluye a Gaza y CisJordania.

P. Si es así, ¿para qué han venido a Madrid?

R. Porque les ha forzado Estados Unidos y la opinión pública internacional. Ahora bien, les gustaría estar aquí sin que se produjera ningún progreso. Y eso no se lo vamos a consentir.

P. Ante el respaldo de la OLP a la Conferencia de Madrid, el radical Georges Habache ha dicho que abandonará el Consejo Nacional Palestino y declarará la guerra a Israel, ¿es ésto un peligro para la OLP?

R. No lo creo así. Pienso que todos los palestinos que escucharon nuestro discurso de ayer [por el jueves] saben que no hemos venido aquí a poner en venta la causa palestina o a rendirnos. Al contrario, estamos aquí porque tenemos un derecho, y éste es el momento de hacérselo saber a todo el mundo. Por eso espero que el ruido de nuestra oposición democrática se reducirá y conducirá al diálogo. Confiamos en que Habache continúe su oposición, pero en la medida de lo posible en el marco de nuestras instituciones.

P. No es la única voz, fuera y dentro de los territorios ocupados, que se ha mostrado contrariada con la reunión de Madrid...

R. Ha habido muchos más manifestantes en las calles de Gaza y Nablús apoyándonos que oponiéndose a nosotros. En todo caso, entendemos su preocupación, que no somos nosotros, sino la intransigencia israelí y las precedentes injusticias norteamericanas. Madrid ha sido la mejor elección para estas negociaciones. Sabemos que los corazones de los españoles están con nosotros. Tenemos una Embajada aquí, estamos completamente representados... igual que Israel. Por tanto, no creo que nadie objete Madrid, si acaso se opondráh al proceso dirigido por EE UU, en el que la intransigencia israelí prevalece.