Claude Simon disertó en Sevilla sobre la literatura y la memoria
El escritor francés Claude Simon, Premio Nobel de Literatura de 1985 y uno de las más destacadas figuras del nouveau roman, dijo ayer en Sevilla que "no hay literatura sin memoria" y rechazó la distinción que habitualmente se hace entre narración y descripción.La obra de Simon, de 77 años, mantiene un estrecho vínculo con la pintura, ya que el escritor se interesó primero por este arte que por la literatura. El novelista, quien se definió como pintor y escritor amateur, resaltó la importancia que los cuadros de los españoles Miró y Tapies han tenido en su trabajo.
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El escritor francés Claude Simon, Premio Nobel de Literatura de 1985 y uno de las más destacadas figuras del nouveau roman, dijo ayer en Sevilla que "no hay literatura sin memoria" y rechazó la distinción que habitualmente se hace entre narración y descripción.La obra de Simon, de 77 años, mantiene un estrecho vínculo con la pintura, ya que el escritor se interesó primero por este arte que por la literatura. El novelista, quien se definió como pintor y escritor amateur, resaltó la importancia que los cuadros de los españoles Miró y Tapies han tenido en su trabajo.
Durante su visita, la primera que el escritor hace a Andalucía, Simon disertó ayer sobre La literatura y la memoria en el Paraninfo de la Universidad hispalense, ante una sala repleta de estudiantes de Filología Francesa.
El novelista francés, que ha sido invitado por la Universidad de Sevilla, asistirá hoy a la lectura de la tesis doctoral que Elena Suárez Sánchez ha realizado sobre la influencia de la pintura en su producción literaria.
Autor de obras como Las georgicas (1981) o La corde raide (1947) -en la que refleja los sucesos de la Guerra Civil española-, su trabajo ha estado siempre encaminado hacia la búsqueda de nuevas formas literarias. Su obra se basa en la destrucción del hilo narrativo habitual, en la fragmentación de la experiencia; características que ha seguido manteniendo en su último libro: L'Acacia (1989).
Simon, quien señaló que la literatura de Zola y de Flaubert están muertas y que hay que introducir cambios en la narrativa de este siglo, actualmente está investigando y recopilando material para preparar su próxima obra.