LA CRISIS DEL GOLFO

El embargo impide a Irak convertirse en una potencia nuclear

JONATHAN PETERSON (LAT).El embargo comercial global que las Naciones Unidas han impuesto a1rak está impidiendo que la persistente ambición de este país de convertirse en una potencia nuclear se haga realidad, según especialistas en temas de proliferación atómica. El corte en el envío de tecnología y de productos de carácter crítico como el uranio ha ralentizado el esfuerzo de Bagdad en este sentido, a pesar de la compleja red de agentes encargada en todo el mundo de contratar los suministros.

"Si no hubiera habido embargo podrían haber sorprendido al mundo en apenas dos años", asegura D...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

JONATHAN PETERSON (LAT).El embargo comercial global que las Naciones Unidas han impuesto a1rak está impidiendo que la persistente ambición de este país de convertirse en una potencia nuclear se haga realidad, según especialistas en temas de proliferación atómica. El corte en el envío de tecnología y de productos de carácter crítico como el uranio ha ralentizado el esfuerzo de Bagdad en este sentido, a pesar de la compleja red de agentes encargada en todo el mundo de contratar los suministros.

"Si no hubiera habido embargo podrían haber sorprendido al mundo en apenas dos años", asegura David H. Albright, un` físico de la Federación de Científicos Norteamericanos. "Pero esto los ha dañado definitivamente".

Más información

Aunque el máximo temor a los arsenales iraquíes se ha centrado en las armas químicas, la crisis del Golfo ha concedido una renovada importancia al riesgo de que el régimen de Sadam Husein adquiriese la capacidad de poder dotarse de artefactos nucleares.

La mayoría de los expertos estima que Bagdad se encuentra aún a varios años de distancia de constituir una auténtica amenaza atómica. Ahora, con el embargo, esta posibilidad se aleja indefinidamente.

Algunos analistas estiman además que la invasión iraquí de Kuwait ha supuesto un choque que hará que muchos países, especialmente de Occidente, abandonen toda idea de establecer o continuar el comercio nuclear con el país de Oriente Próximo, aun en el caso de que la crisis actual se resuelva de forma pacífica. "La invasión cambia todo", afirma Gary Milhollin, director del Proyecto Wisconsin de control de armas nucleares.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

El embargo, que varios países occidentales contribuyen a aplicar, constituye el último revés a un empeño al que Sadam Husein ha dedicado atención prioritaria desde mitad de los años setenta. Ello demuestra cómo una mezcla conveniente de tenacidad y dinero puede llevar significativamente a un país por el camino de dotarse de su propio programa nuclear.

Archivado En