El productor del Festival Shakespeare neoyorquino rechaza una subvención

Joseph Papp, el productor del New York Shakespeare Festival, ha renunciado a los 50.000 dólares (5.250.000 pesetas) de ayuda oficial que le habían sido enviados desde la Fundación Nacional para las Artes (NEA), el organismo oficial que promociona el arte en este país. Papp ha renunciado al dinero en protesta por las restricciones de ayudas oficiales al arte denominado "obsceno".La acción del productor del Festival Shakespeare pasa a engrosar la larga lista de norteamericanos contrarios a que cualquier manifestación de arte deba superar censuras oficiales de ningún tipo a la hora de recibir din...

Joseph Papp, el productor del New York Shakespeare Festival, ha renunciado a los 50.000 dólares (5.250.000 pesetas) de ayuda oficial que le habían sido enviados desde la Fundación Nacional para las Artes (NEA), el organismo oficial que promociona el arte en este país. Papp ha renunciado al dinero en protesta por las restricciones de ayudas oficiales al arte denominado "obsceno".La acción del productor del Festival Shakespeare pasa a engrosar la larga lista de norteamericanos contrarios a que cualquier manifestación de arte deba superar censuras oficiales de ningún tipo a la hora de recibir dinero público y contribuye a aumentar la polémica nacional que se desató con la prohibición de una exposición de fotografías de Robert Mappelthorpe en el Museo Corcoran de Washington, el pasado verano.

El Festival Shakespeare ha estado recibiendo dinero de la NEA desde 1966 y ésta es la primera ocasión que no acepta una ayuda. "No podemos trabajar con la espada de Damocles sobre nuestras cabezas", ha comentado Papp.

Cada verano, el Festival Shakespeare organiza obras de teatro clásico que se representan en Central Park de forma gratuita. Algunas de las producciones del festival han ganado 28 premios Tony y tres Pulitzer, y es una de las manifestaciones culturales más prestigiosas y populares de EE UU. [Por otra parte, según informa la agencia EFE, Matislaw Rostropovich, director artístico de la Orquesta Sinfónica Nacional de Estados Unidos comparó el pasado viernes las resticciones que imponen las autoridades estadounidenses a las artes, con la censura que se imponía en la Unión Soviética a escritores, artistas y compositores. Rostropovich forma parte de un grupo de personalidades que reclaman una nueva regulación para la Fundación Nacional para las Artes (NEA)].