Muchas versiones, pocos éxitos

Bastantes años antes de que Moliére se apropiara de El burlador, hay noticias de que pequeñas compañías de comedia dell'arte presentaban en llalla y Francia pantomimas basadas en la leyenda del libertino sevillano que atropellaba a las mujeres y desafiaba a Dios. Y fue precisamente un italiano, Gaspero Angiolim (1731-180-3), quien logró la primera versión coreográfica de éxito, estrenada en Viena en 1761.Con un libreto de Raniero Calzabigí y música de Gluck, el Don Juan ou le festin de Pierre se mantuvo en el repertorio durante 40 años y es consaderado como una de l...

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Bastantes años antes de que Moliére se apropiara de El burlador, hay noticias de que pequeñas compañías de comedia dell'arte presentaban en llalla y Francia pantomimas basadas en la leyenda del libertino sevillano que atropellaba a las mujeres y desafiaba a Dios. Y fue precisamente un italiano, Gaspero Angiolim (1731-180-3), quien logró la primera versión coreográfica de éxito, estrenada en Viena en 1761.Con un libreto de Raniero Calzabigí y música de Gluck, el Don Juan ou le festin de Pierre se mantuvo en el repertorio durante 40 años y es consaderado como una de las obras maestras del ballet d'action o drama bailado que propugnaban los refórmadores ilustrados de la danza teatral, como Noverre y Viganó, quien también, unos años después, es trenó en Venecia su propia versión. En el siglo XIX, Don Juan no interesó tanto a los grandes coreógrafos -quizá porqué la interpretación en clave romántica de Zorrilla no les llegó a tiempo-. Pero ya en nuestro siglo fueron de nuevo los coreógrafos con vocacion dramática y renovadora, como Laban (1925), Fokine (1936), Gsovsky (1938) e incluso Ashiton (1948), quienes se enfrentaron al mito, ya plena mente consolidado y universalizado, sin que, ninguna de ellas alcanzara, sin embargo, más que un éxito pasajero.

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Versiones contemporáneas

Entre las versiones contemporáneas hay que destacar la de Neumeir (1972) para el Ballet de Frankfort y la de Lew Christensen, en San Francisco, que utilizó música de Joaquín Rodrigo. Los coreógrafos de danza española han intentado, también hacerse con el personaje y recuperarlo en su entorno sevillano original. Antonio Gades estrenó en 1968 su propia versión -sobre un guión de Alfredo Mañas y una partitura expresamente creada por García Abril-, y hace apenas un año, José de Udaeta (el Comendador de la versión de José Antonio) presentó con la bailarina Susana, en una gira por Suiza y la RFA, un Don Juan (encarnado por el Don Luis del estreno del Ballet Nacional, Antonio Alonso) que fue muy bien acogido por la crítica internacional.

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