La consejera de Integración Social propone crear unas cartillas sanitarias para las prostitutas

Elena Vázquez Menéndez, consejera de Integración Social de la Comunidad de Madrid, se manifiesta partidaria de regular la prostitución, y como primer paso quiere crear unas cartillas sanitarias para controlar el estado de salud de las mujeres que se dedican a esta actividad. En posteriores etapas se contemplaría la posibilidad de que las prostitutas fuesen consideradas como unas trabajadoras más, con Seguridad Social y derecho a percepciones en caso de enfermedad.

"La prostitución es un tema siempre polémico. Pero yo alzo la voz y estoy dispuesta a tirar para adelante, porque hay que ha...

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Elena Vázquez Menéndez, consejera de Integración Social de la Comunidad de Madrid, se manifiesta partidaria de regular la prostitución, y como primer paso quiere crear unas cartillas sanitarias para controlar el estado de salud de las mujeres que se dedican a esta actividad. En posteriores etapas se contemplaría la posibilidad de que las prostitutas fuesen consideradas como unas trabajadoras más, con Seguridad Social y derecho a percepciones en caso de enfermedad.

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"La prostitución es un tema siempre polémico. Pero yo alzo la voz y estoy dispuesta a tirar para adelante, porque hay que hacer algo por estas personas", dice Elena Vázquez. Y añade: "También quiero entrar en la prostitución masculina, que es algo que a menudo se nos olvida". La postura de la Consejería de Integración se puede resumir así: a las mujeres (o a los hombres) que quieran salir de la prostitución se les facilitarán las ayudas de los servicios sociales; pero los que deseen "dedicarse libremente" a esta profesión que lo hagan "con plenos conocimientos".La Administración regional reconoce que "salir de la prostitución es algo muy difícil para muchas personas", y achaca esta dificultad a varias causas: la falta de autoestima, las elevadas ganancias, la facilidad para obtener dinero y la adicción a las drogas.

Los intentos para regular la prostitución -aunque sólo sea en su aspecto sanitario- chocan, sin embargo, con los recelos de las interesadas. Estas mujeres, a las que la vida ha hecho sumamente desconfiadas, tienen miedo de que sus datos personales puedan ser utilizados posteriormente para otros fines.

Algunas organizaciones relacionadas con la mujer temen que el control sanitario que pretende la Administración esté destinado a ser una garantía para los clientes más que a una auténtica preocupación por la salud de las prostitutas.

Según diversas estimaciones, hay entre 15.000 y 20.000 mujeres que viven de la prostitución en la región de Madrid. Según fuentes municipales, unas 700 hacen la carrera en la zona Centro, mientras que en Latina, Tetuán, Vallecas y Carabanchel también hay un alto índice.

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Programa de ayuda

En Madrid funciona desde hace dos años un programa de ayuda a las prostitutas en el que intervienen la Comunidad, el Ayuntamiento, Cáritas y la congregación religiosa de las Oblatas. Los responsables del plan reconocen que éste se halla aún en los pasos iniciales y que los resultados no son como ellos desean. "Pero al menos se han unificado todos los recursos disponibles... Porque hasta entonces cada institución iba por su cuenta".El plan cuenta con pisos que se ponen a disposición de todas las prostitutas con hijos que quieran pasar con ellos los fines de semana, lejos del ambiente generalmente sórdido en que se desenvuelve su vida diaria. Las mujeres, a cambio, tienen que estar todo el tiempo con sus hijos y no pueden salir a hacer la carrera y volver al piso.

El programa que coordina la Consejería de Integración Social dispone de varios talleres ocupacionales, donde las prostitutas reciben una pequeña cantidad de dinero. Los esfuerzos por retirar de la calle a estas mujeres han tenido éxito "en varios casos", pero muchos menos de los que pretenden quienes participan en el plan. Éstos opinan que el viejo oficio es algo "denigrante".

La doctora Concha Colomo, que trabaja en el centro de salud del distrito Centro, dice que a dicha institución acuden con regularidad más de 100 prostitutas. Colorno afirma que "estas mujeres son conscientes de que deben usar preservativos, pero muchas veces nos cuentan que sus clientes se niegan a ello".

Consuelo Ruiz Jarabo, secretarla de la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública, considera que la prostitución debe abordarse desde el entorno familiar y tocando los aspectos fisicos y psicológicos. "Ahora sólo se enfoca desde el punto de vista individual y sexual", añade.

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