Un líder guerrillero acusa a Pakistán de acosar a los rebeldes afganos moderados

GEORGINA HIGUERAS ENVIADA ESPECIAL, Sebgatula Mejadedi, presidente de la Alianza muyahidin, denunció ayer la existencia de una "conspiración" contra los partidos moderados integrados en ésta. El líder del Frente Afgano de Liberación Nacional (ANLF) indicó que dos de sus comandantes, invitados -a participar en el Shura, o Consejo Consultivo afgano, fueron detenidos por la policía paquistaní en la frontera. La conferencia de prensa fue convocada por Zabihula Mojadedi, hijo del dirigente muyahidin, quien indicó que el presidente de la Alianza, de 62 años, se encuentra "enfermo". Mojadedi asistió ...

GEORGINA HIGUERAS ENVIADA ESPECIAL, Sebgatula Mejadedi, presidente de la Alianza muyahidin, denunció ayer la existencia de una "conspiración" contra los partidos moderados integrados en ésta. El líder del Frente Afgano de Liberación Nacional (ANLF) indicó que dos de sus comandantes, invitados -a participar en el Shura, o Consejo Consultivo afgano, fueron detenidos por la policía paquistaní en la frontera. La conferencia de prensa fue convocada por Zabihula Mojadedi, hijo del dirigente muyahidin, quien indicó que el presidente de la Alianza, de 62 años, se encuentra "enfermo". Mojadedi asistió el viernes a la corta sesión del Shura, y el sábado, a la reunión de los siete líderes de la Alianza, al parecer, en buen estado de salud.

El Gobierno paquistaní no ha querido hacer comentario alguno sobre la detención de los comandantes. Ambos luchan en el frente de la antigua capital afgana, Kandahar, y se ha revelado el nombre de uno solo de ellos, Haji Marash.Al parecer, las causas alegadas para la detención están relacionadas con el espionaje del régimen afgano en -Pakistán y los contactos de estos comandantes con la milicia de Najibulá.

El dictador Zia Ul Haq llevó siempre personalmente, hasta su muerte en agosto pasado, las cuestiones afganas y volcó la ayuda internacional a la guerrilla en el más extremista de los dirigentes, Gulbudin Heckmatiar, líder del Hezbi Islami.

Fuentes diplomáticas aseguran que en enero pasado funcionarios de "Estados Unidos y otros países occidentales" se reunieron con el Gobierno paquistaní para exigirle que hiciera un reparto más equitativo de la ayuda. Los funcionarios mantuvieron conversaciones con los altos mandos del Ejército y del ISI (espionaje militar), que son los que continúan controlando el problema afgano.

"Está claro que los radicales quieren exterminarnos de una forma u otra, pero no creo que las detenciones de los comandantes formen parte de una conspiración", dijo a este periódico Azim Naser Zia, portavoz del Frente Nacional Islámico de Afganistán (NIFA), otro de los partidos moderados.

Ayer vobrieron a reunirse los líderes de los siete partidos sunies que integran la Alianza, con la ausencia de su presidente, para tratar (le que fructifique la nueva reunión del Shura convocada para hoy en Rawalpindi y que de ella salga una alternativa de gobierno de Najibulá en Kabul.

Conforme se aproxima el fin de la retirada soviética, que debe estar terminada el miércoles próximo, se han hecho más evidentes las diferencias entre los cuatro partidos radicales y los tres moderados, todos ellos fundamentalistas sunies, que integran la Alianza.

Mojadedi insistió en que si los slifies no estín representados, el Shura estara "incompleto", y amenazó con retirar su partido. Los moderados, más débiles militar y políticamente, aunque gozan de mayor apoyo popular, nccesitan a los shiíes para obtener un mayor equilibrio de fuerzas. Karim Jalili, líder de los ocho partidos de la resistencia afgana en Irán, sigue amenazando desde el viernes con marcharse si no se le conceden 100 escaños en el Shura.

[El viceprímer ministro de Irán Alireza Moayeri llegó ayer a Islamabad a fin de entregar al presidente de Pakistán, Ghulam Ishaq Jan, un mensaje de su homólogo iraní, Ali Jamenei sobre el problema aigano, informó la agencia Irna. Moayeri se entrevistará, asimismo, en Peshawar, con los líderes de la Alianza.]

El desacuerdo sobre la participación shií en este Consejo Consultivo de 529 miembros hizo colapsar la sesión del viernes a sólo una hora de su comienzo. Los líderes muyahidin dicen, ya abiertamente que, lo único que les mantenía unidos era la lucha contra el "enemigo común. Desaparecido éste, no existe razón para continuar esa unión", añaden. Sin embargo, todos los países interesados en la estabilidad de la zona y que a lo largo de estos diez años han ayudado a los muyahidin (Pakistán, Irán, Arabia Saudí, China y Estados Unidos) defienden que los afganos deben de formar un Gobíerno de transición de "amplia base". Para la URS S, esa amplia base debe de incluir al Partido Democrático Popular de Afganistan (PDPA), actualmente en el poder en Kabul.