El ministerio mantendrá su actual política de tasas

La Administración mantendrá la actual política en materia de tasas universitarias, consistente en no elevar su coste, en la medida de lo posible, por encima del IPC anual. Así lo manifestó ayer el titular de Educación y Ciencia, José María Maravall, en el acto de presentación de] informe sobre: la reforma universitaria, elaborado por el Consejo Internacional para el Desarrollo de la Educación (ICED). [Ver Suplemento de Educación del martes pasado].El informe propone adecuar la elevación de las tasas a la de las becas, con lo que Maravall se encuentra básicamente de acuerdo, pero puntualizó que...

La Administración mantendrá la actual política en materia de tasas universitarias, consistente en no elevar su coste, en la medida de lo posible, por encima del IPC anual. Así lo manifestó ayer el titular de Educación y Ciencia, José María Maravall, en el acto de presentación de] informe sobre: la reforma universitaria, elaborado por el Consejo Internacional para el Desarrollo de la Educación (ICED). [Ver Suplemento de Educación del martes pasado].El informe propone adecuar la elevación de las tasas a la de las becas, con lo que Maravall se encuentra básicamente de acuerdo, pero puntualizó que la filosofía que inspira este principio está aún lejos de nuestras posibilidades económicas. El ministro admitió que, pese al esfuerzo realizado en los últimos años, la cobertura de las becas todavía es insuficiente para garantizar una verdadera igualdad de oportunidades, y ello imposibilita una adecuación automática del incremento de las tasas al de las becas.

Los graves problemas de financiación de la universidad, según Maravall, tienen que afrontarse mediante un esfuerzo para aproximar el gasto en Educación a los niveles de los países de la Comunidad Europea y a través de fórmulas de financiación externas a la universidad.

Philip Coombs, vicepresidente del ICED, hizo un resumen del informe, del que subrayó, entre otros aspectos negativos de la universidad española, la concentración de estudiantes en las carreras de ciclo largo (las de ciclo corto representan sólo una cuarta parte de la matrícula global de las universidades) y en estudios de ciencias sociales frente a los de carácter científico y técnico.