Michael Nyman dice que entre Mozart y el 'rock' hay una continuidad

El compositor británico Michael Nyman ha actuado por primera vez en España, dentro del V Festival Internacional de Teatro de Granada, como director musical y pianista de su ópera El hombre que confundió a su mujer con un sombrero. Esta ópera, que Nyman compuso por encargo del histórico grupo teatral británico ICA (Instituto de las Artes Contemporáneas), refleja las características de este autor de música minimalista. Nyman opina que entre Mozart, Brahms y el rock "hay una clara continuidad".

Michael Nyman es conocido como creador de música de películas como las dirigidas por Peter Green...

El compositor británico Michael Nyman ha actuado por primera vez en España, dentro del V Festival Internacional de Teatro de Granada, como director musical y pianista de su ópera El hombre que confundió a su mujer con un sombrero. Esta ópera, que Nyman compuso por encargo del histórico grupo teatral británico ICA (Instituto de las Artes Contemporáneas), refleja las características de este autor de música minimalista. Nyman opina que entre Mozart, Brahms y el rock "hay una clara continuidad".

Michael Nyman es conocido como creador de música de películas como las dirigidas por Peter Greenaway o por sus colaboraciones con músicos como Brian Eno, Roxy Music, Sting o Police. Nyman, que para crear la ópera presentada en Granada ha partido en algunas ocasiones de la música de Schumann, afirmó que "entre este compositor, Mozart, Brahms, Monteverdi y el rock hay una clara continuación".A pesar de que el encargo de componer El hombre que confundió... fue realizada por el grupo ICA, ese compromiso surgió de una propuesta planteada por el propio Nyman. La historia, basada en un caso real que trató el neurólogo Oliver Sacks, interesó desde el primer momento a Nyman. "A medida que leía el libro sobre este caso, mis intereses coincidían cada vez más con la obra y veía que era perfecta para una ópera. Lo que más costó fue convencer a Sacks de que no era algo sensacionalista".

El proyecto, puesto en marcha tras las conversaciones de Nyman y el director artístico del ICA, Michael Morris, responsable de la puesta en escena, no sólo está planteado para representar en teatros, sino para realizar también una película.

La ópera narra el caso de un páciente que sufre una curiosa patología: confunde objetos de la cotidianidad y sólo puede reconstruir su sentido a través de la música. El tratamiento irónico y humorístico que plantea el libro fue lo que más atrajo a Nyman. "Este paciente utiliza la música para poder seguir en la primavera de su vida; sin ella está mutilado, cortado de la realidad. Fue la filosofía que lleva envuelto todo esto lo que más me enganchó y no el caso específico, sino cómo se plantea".

Nyman no vive en ningun momento su relación con el rock y su composición de esta ópera como una contradicción.

"El rock es algo que está en mi mente. Todo son reconversiones de mis propias músicas y yo me puedo reconocer igualmente en la música popular o en el rock de los ochenta. Entre Schumann, Mozart, Brahms, Monteverdi o el rock hay una clara continuidad. El error lo cometen los críticos musicales que toman como referencia coníposiciones de siglos pasados, y lo que ocurre en realidad es que no entienden el modernismo", dice el compositor Michael Nyman.