Misiles y espías
Muchos habrán sentido alivio porque la polémica sobre espionaje haya sido desplazada en parte por la oferta hecha por Gorbachov de discutir la limitación de misiles de corto alcance en Europa previamente a cualquier acuerdo de reducción de las fuerzas de alcance intermedio. El anuncio de Gorbachov, justo 72 horas antes de la ampliamente planificada visita de Shultz a Moscú, deja a Occidente muy poco tiempo para considerar la nueva postura soviética y decidir y coordinar su respuesta. Existe el peligro de que Estados Unidos se apresure a aceptar un acuerdo que el mundo occidental tuviera que la...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Muchos habrán sentido alivio porque la polémica sobre espionaje haya sido desplazada en parte por la oferta hecha por Gorbachov de discutir la limitación de misiles de corto alcance en Europa previamente a cualquier acuerdo de reducción de las fuerzas de alcance intermedio. El anuncio de Gorbachov, justo 72 horas antes de la ampliamente planificada visita de Shultz a Moscú, deja a Occidente muy poco tiempo para considerar la nueva postura soviética y decidir y coordinar su respuesta. Existe el peligro de que Estados Unidos se apresure a aceptar un acuerdo que el mundo occidental tuviera que lamentar más tarde. 13 de abril