Amenaza de expulsión para tres periodistas españoles

ENVIADO ESPECIAL

Los tres periodistas españoles retenidos en Bamako seguían ayer sin ningún dato oficial sobre su situación y gozaban de libertad de movimientos, a pesar de hallarse indocumentados. Se trata de Santiago Aroca, de la revista Tiempo, Melchor Miralles, de Diario 16, y José Luis Vidal, de la agencia Efe. Según fuentes policiales, serán expulsados hoy. Las habitaciones de los tres periodistas en el hotel de La Amistad fueron registradas el sábado, después de que solicitaran a la oficina de emigración si constaban en sus registros los nombres los presu...

ENVIADO ESPECIAL

Los tres periodistas españoles retenidos en Bamako seguían ayer sin ningún dato oficial sobre su situación y gozaban de libertad de movimientos, a pesar de hallarse indocumentados. Se trata de Santiago Aroca, de la revista Tiempo, Melchor Miralles, de Diario 16, y José Luis Vidal, de la agencia Efe. Según fuentes policiales, serán expulsados hoy. Las habitaciones de los tres periodistas en el hotel de La Amistad fueron registradas el sábado, después de que solicitaran a la oficina de emigración si constaban en sus registros los nombres los presuntos etarras Ignacio Aracama y Belén González.

Extraña acusación

Después de entrevistarse con el segundo secretario de la embajada de Argelia en Bamako, los periodistas fueron requeridos por el comandante Bamba para que explicaran su estancia en Malí. Los periodistas no accedieron a contestar a las preguntas. El oficial maliense sugirió que podían ser terroristas, traficantes de drogas o agentes. Al término del registro, la policía incautó el material profesional de los periodistas.El comandante Bamba explicó ayer por la mañana a este periódico que hoy lunes los periodistas españoles serían expulsados. Según Bamba, los enviados especiales españoles han mentido a las autoridades malienses.

Según el comandante, que aseguró ser el responsable de la seguridad, los periodistas se identificaron como turistas y no como periodistas. Según el oficial de policía, este hecho podría ser delictivo y constituir razón suficiente para la expulsión. Los tres periodistas recibieron un visado turístico en el consulado de Malí en París, donde se identificaron como periodistas. En la hoja de entrada a este país hicieron constar como profesión también la de periodista. Pero en el pasaporte de dos de ellos constaba otra profesión.

La embajada de España en Dakar, que se encarga de los negocios diplomáticos españoles en Bamako, se interesó ayer directamente por los tres periodistas cerca del Gobierno de Malí y confirmó sus identidades y profesión. El cónsul no había recibido ayer por la tarde ninguna comunicación sobre la situación de los periodistas. [El encargado de negocios de la embajada de España en Dakar ha recibido órdenes del Ministerio de Exteriores para que se dirija a Bamako a fin de solucionar el problema de los tres periodistas españoles, informa Europa Press].

Bamba aseguró ayer que estaba informado de los pasos de los periodistas desde que entraron en Malí. Según los periodistas, la interpretación más plausible es que haya sido la embajada argelina la que ha dado información al comandante.