LAS SUPERPOTENCIAS DIALOGAN

Estados Unidos acepta eliminar los euromisiles

Estados Unidos presentó ayer en la mesa de negociaciones de Ginebra un proyecto de tratado con vistas al "desmantelamiento y destrucción" en cinco años, de los misiles de alcance intermedio (INF) desplegados en Europa. El documento incluye una referencia a la necesidad de reducir los cohetes soviéticos de corto alcance y al "derecho" de EE UU a alcanzar una paridad al respecto. El proyecto, que responde a la propuesta formulada el pasado lunes por la URSS en el mismo foro, fue presentado por Maynard Glitman, responsable norteamericano en las conversaciones sobre los INF, a su homólogo soviétic...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Estados Unidos presentó ayer en la mesa de negociaciones de Ginebra un proyecto de tratado con vistas al "desmantelamiento y destrucción" en cinco años, de los misiles de alcance intermedio (INF) desplegados en Europa. El documento incluye una referencia a la necesidad de reducir los cohetes soviéticos de corto alcance y al "derecho" de EE UU a alcanzar una paridad al respecto. El proyecto, que responde a la propuesta formulada el pasado lunes por la URSS en el mismo foro, fue presentado por Maynard Glitman, responsable norteamericano en las conversaciones sobre los INF, a su homólogo soviético, Lem Masterkov, en una reunión de una hora y media en la sede diplomática de EE UU en la ciudad suiza. " URSS tiene en territorio europeo 270 SS-20 (de tres cabezas cada uno), y EE UU, 208 misiles de crucero y 108 Pershing 2.

El norteamericano Max Kampelman y el soviético Yuly Vorontsov, jefes de los equipos que negocian en Ginebra sobre INF, armas estratégicas y armas espaciales, mantuvieron una reunión separada para pactar la prolongación de la actual ronda negociadora, que debía haber concluido ayer."Hemos puesto sobre la mesa un documento completo que detalla todo tipo de verificaciones" para su aplicación por ambas partes, explicó Glitman, sin entrar en detalles. El diario The Washington Post afirmaba ayer que el proyecto incluye inspecciones mutuas de lugares, confirmados o supuestos, donde se fabriquen, almacenen, desplieguen, mantengan o desmantelen los misiles afectados por el acuerdo.

Algunos socios atlánticos de Estados Unidos, concretamente el Reino Unido y la República Federal de Alemania (RFA), preocupados por la superioridad soviética en misiles de corto alcance, desearían contar con al menos una semana antes de tener que definirse sobre la propuesta norteamericana. El plan soviético proponía iniciar negociaciones sobre los cohetes de corto alcance (incluidos los desplegados en la República Democrática Alemana y en Checoslovaquia en respuesta a los euromisiles norteamericanos) inmediatamente después de que se firme el acuerdo sobre los misiles de alcance intermedio. Estados Unidos pretende que este compromiso, el de negociar las armas de corto alcance, quede ya sellado en un eventual acuerdo sobre euromisiles.

El proyecto norteamericano presentado ayer en Ginebra -muy similar al soviético- ha sido consultado con los aliados y se basa en la opción cero formulada en la cumbre de Reikiavik, los pasados 11 y 12 de octubre, por Ronald Reagan, según la cual los euromisiles serían desmantelados en su totalidad y los misiles de medio alcance de ambas superpotencias quedarían reducidos a 100 cabezas nucleares en EE UU y a otras 100 en la zona asiática de la URSS. Esa opción cero fue desechada entonces por Mijail Gorbachov, que pretendía ligarla a la limitación de la Iniciativa de Defensa Estratégica (SDI) a los trabajos de laboratorio. La nueva postura de Moscú se olvida, asimismo, de su anterior insistencia en que un eventual acuerdo sobre los euromisiles implicase la congelación de las fuerzas nucleares francesa y británica en su actual nivel, es decir, en 162 lanzadores.

Glitman explicó ayer que incluso los dos centenares de Ojivas que conservarían las superpotencias podrían reducirse a cero, pero que este punto no figura en el proyecto de tratado presentado por EE UU.

La definición de la zona asiática de la URSS es uno de los temas espinosos del eventual acuerdo. Informaciones extraoficiales afirmaban ayer en Washington que EE UU pretende que sea el meridiano que pasa por Novosibirsk el que defina esta frontera.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

El número tres del Departamento de Estado, Michael Armacost, viajará a Moscú a mediados de este mes, junto a Max Kampelman, para preparar una visita del responsable de la política exterior norteamericana, George Shultz. Todo apunta a que Reagan y Gorbachov podrán entrevistarse, por fin, en Washington en el curso de este año y sellar con un acuerdo su ansiada entrevista.

La Administración de Ronald Reagan, según afirmó el propio presidente en la noche del martes (madrugada del miércoles en España), entiende que el cambio de posición de Gorbachov se debe a Ia firmeza" demostrada por EE UU y sus aliados en el despliegue de los misiles de crucero y Pershing 2 norteamericanos en Europa a partir de 1983, a los sustanciales cambios" que están produciéndose en la URSS y a la "ofensiva soviética de paz" ante la opinión pública.

El jefe de los negociadores norteamericanos tiene previsto trasladarse hoy a Bruselas para informar más detalladamente a los aliados sobre la propuesta depositada ayer por Estados Unidos en la mesa negociadora ginebrina.

Archivado En