El secreto de no fingir

"El secreto de Giulietta es que no finge, a diferencia de lo que hace la mayoría de los actores. Giulietta es Giulietta; no intenta vender una idea más alta de la que tiene de sí misma. Su más grande personaje es el que realiza en la vida, y es que el personaje más difícil para un actor es representarse a sí misino". Así definía ayer la labor de la actriz Tulio Kesich, autor de una larga entrevista incluida en la monografia qué la Mostra ha editado sobre Masina.Giulietta, que había inaugurado la noche anterior el festival, en una sesión en la que se proyectó...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

"El secreto de Giulietta es que no finge, a diferencia de lo que hace la mayoría de los actores. Giulietta es Giulietta; no intenta vender una idea más alta de la que tiene de sí misma. Su más grande personaje es el que realiza en la vida, y es que el personaje más difícil para un actor es representarse a sí misino". Así definía ayer la labor de la actriz Tulio Kesich, autor de una larga entrevista incluida en la monografia qué la Mostra ha editado sobre Masina.Giulietta, que había inaugurado la noche anterior el festival, en una sesión en la que se proyectó Las noches de Cabiria, de Fellini, narraba sus impresiones cuando ve películas interpretadas por ella. "Cuando veo un filme en el que aparezco yo", dijo, "busco apartarme del personaje que yo interpreto para verlo como conjunto. Todavía me conmuevo cuando veo La Strada, y también experimento una cierta rabia, porque me da rabia el personaje de Gelsomina". "Cuando veo otras películas interpretadas por mí, no veo la actriz que soy yo, sino el resto. Y es eso lo me hace comprender qué le gusta al público".

Más información
Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En