Crítica:'JAZZ'

Aire de Nueva York

Los aires neoyorquinos han traído a Madrid -¡cómo no!- alguna vibración del jazz que allí se respira. Billy Taylor, hombre polifacético que reúne en su persona las condiciones de compositor, arreglista, profesor, conferenciante y pianista, vino a sentarse a las teclas haciéndose acompañar por el contrabajista Victor Gaskin y el batería Keith Coppeland. Taylor es un hombre de una elegancia exquisita que se refleja en todas y cada una de sus actitudes y, por supuesto, en su forma de entender el piano. A pesar de poseer un gran dominio del instrumento, no es el alarde técnico lo que caracteriza s...

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Los aires neoyorquinos han traído a Madrid -¡cómo no!- alguna vibración del jazz que allí se respira. Billy Taylor, hombre polifacético que reúne en su persona las condiciones de compositor, arreglista, profesor, conferenciante y pianista, vino a sentarse a las teclas haciéndose acompañar por el contrabajista Victor Gaskin y el batería Keith Coppeland. Taylor es un hombre de una elegancia exquisita que se refleja en todas y cada una de sus actitudes y, por supuesto, en su forma de entender el piano. A pesar de poseer un gran dominio del instrumento, no es el alarde técnico lo que caracteriza su estilo, sino más bien la discreción, la economía de medios que utiliza para expresarse. Su mano izquierda simplemente se insinúa -hay que escuchar con bastante atención para descubrirla-, dejando de este modo un amplio margen a la parte melódica (su mano derecha), que sigue una línea siempre cantabile, de forma que su improvisación parece casi más influenciada por el estilo vocal que por el de los instrumentos de viento.En esas coordenadas de mesura y delicadeza, Victor Gaskin queda perfectamente encuadrado, combinando un acompañamiento leve y casi excesivamente sobrio con una extraordinaria fluidez como solista. Es destacable el empleo que este contrabajista hace de las dobles cuerdas, no sólo por lo original, sino también por lo virtuoso. Coppeland, sin embargo, apareció en la sesión de ayer como un instrumentista mecánico, con, una técnica no muy brillante y poco favorable a la labor del conjunto.

Billy Taylor Trío, Lou Bennett Trío

Semana de Nueva York en Madrid. Centro Cultural de la Villa. Madrid, 14 de noviembre de 1984.

El organista Lou Bennett ocupó con su trío la segunda parte del concierto, oponiendo su habitual fraseo nervioso y decidido a la tranquilidad algo distante del guitarrista Carlos Gonzálbez.

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