Injusta omisión de Vidal-Beneyto
El libro Crónica del antifranquismo, del que son autores Fernando Jáuregui y Pedro Vega, al relatar la participación española en el Congreso del Movimiento Europeo en Munich en 1962, incurre en diversos errores. Entre ellos los que se refieren a los españoles asistentes , pues incluye a personas que no participaron en él y en cambio omite a otras que sí lo hicieron. De las omisiones, la más relevante es la de José Vidal-Beneyto, por cuanto fue figura capital tanto en la gestación como en la organiza_ ción de lo que el franquismo llamó "El contubernio de Munich". En efecto, conjuntamente...
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El libro Crónica del antifranquismo, del que son autores Fernando Jáuregui y Pedro Vega, al relatar la participación española en el Congreso del Movimiento Europeo en Munich en 1962, incurre en diversos errores. Entre ellos los que se refieren a los españoles asistentes , pues incluye a personas que no participaron en él y en cambio omite a otras que sí lo hicieron. De las omisiones, la más relevante es la de José Vidal-Beneyto, por cuanto fue figura capital tanto en la gestación como en la organiza_ ción de lo que el franquismo llamó "El contubernio de Munich". En efecto, conjuntamente con Enrique Adroher-Gironella, contribuyó de forma decisiva a que la Asociación Española de Cooperación Europea, desde Madrid, y el Consejo Federal Español del Movimiento Europeo, desde París, promovieran el primer encuentro de las fuerzas de la oposición al franquismo del interior y del exilio y reivindicaran la presencia de la España democrática en la Europa institucional.Como escribe Dionisio Ridruejo en carta a Fernando Álvarez de Miranda fechada en París el 1 de mayo de 1963, sin los esfuerzos de Vidal-Beneyto Munich no hubiera sido posible.
Esta injusta omisión viene agravada por una referencia aún más injusta. Se afirma en la página 271 que Ridruejo había dado cita a Vidal en Estrasburgo para que éste le ayudara en el paso de la frontera franco-alemana, y que Vidal no acudió. Los hechos fueron muy otros. Vidal-Beneyto organizó el viaje de los cuatro asistentes que no tenían pasaporte (Ridruejo, José Suárez Carreño, Fernando
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