El ministro estaba en CASA

El secretario estadounidense de Defensa, Caspar Weinberger, sorprendió telefónicamente al ministro de Defensa, Narcís Serra, a primera hora de la tarde del viernes. Weinberger le comunicó la decisión de EE UU de no adquirir el Aviocar español cuando Serra estaba visitando la factoría de Construcciones Aeronáuticas, SA, (CASA) en Getafe (Madrid), donde se fabrica ese aparato.Serra no dio la noticia a sus acompañantes, entre los que figuraban el secretario de Estado del departamento, los presidentes del Instituto Nacional de Industria (INI) y de CASA, y el director general de Armamento y Materia...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El secretario estadounidense de Defensa, Caspar Weinberger, sorprendió telefónicamente al ministro de Defensa, Narcís Serra, a primera hora de la tarde del viernes. Weinberger le comunicó la decisión de EE UU de no adquirir el Aviocar español cuando Serra estaba visitando la factoría de Construcciones Aeronáuticas, SA, (CASA) en Getafe (Madrid), donde se fabrica ese aparato.Serra no dio la noticia a sus acompañantes, entre los que figuraban el secretario de Estado del departamento, los presidentes del Instituto Nacional de Industria (INI) y de CASA, y el director general de Armamento y Material. En el grupo, sin embargo, sí se comentó el pesimismo existente con respecto a la decisión del programa EDSA (European Distribution System Aircraft, sistema aéreo de distribución en Europa) para las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos (USAF).

En este ambiente, se repasaron algunas gestiones realizadas en favor del Aviocar por los titulares de Defensa y de Asuntos Exteriores ante las autoridades norteamericanas, pero todos parecieron estar de acuerdo en que las presiones de la primera ministra británica, Margaret Thatcher, habían sido muy superiores. "Comprendemos, por supuesto, que haya una cierta desilusión del lado español por esta decisión, pero creemos que habrá otras oportunidades para que firmas españolas puedan competir por contratos en el campo de la defensa en EE UU. Esperamos que estas firmas aprovechen estas oportunidades", señalaba una breve nota oficial difundida ayer por la Embajada norteamericana en Madrid.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En