Tribuna:

Encierros de jornaleros en siete pueblos de la provincia de Sevilla

El otoño caliente del campo andaluz comenzó a materializarse durante la jornada de ayer, al producirse encierros de jornaleros en siete pueblos de la provincia de Sevilla, mientras que CC OO y el SOC anuncian ya acciones de envergadura, incluyendo ocupaciones de tierras, durante el próximo mes de diciembre, cuando el proyecto de ley de reforma agraria de la Junta de Andalucía será debatido por vez primera en el Parlamento andaluz.Los encierros protagonizados ayer en los ayuntamientos de Marinaleda, Osuna, Aguadulce, Pedrera, Gilena, Los Corrales y Martín de la Jara, obedecen, según ...

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El otoño caliente del campo andaluz comenzó a materializarse durante la jornada de ayer, al producirse encierros de jornaleros en siete pueblos de la provincia de Sevilla, mientras que CC OO y el SOC anuncian ya acciones de envergadura, incluyendo ocupaciones de tierras, durante el próximo mes de diciembre, cuando el proyecto de ley de reforma agraria de la Junta de Andalucía será debatido por vez primera en el Parlamento andaluz.Los encierros protagonizados ayer en los ayuntamientos de Marinaleda, Osuna, Aguadulce, Pedrera, Gilena, Los Corrales y Martín de la Jara, obedecen, según sus organizadores, a la aplicación por parte del Gobierno Civil de Sevilla del concepto de unidad familiar en el sistema de empleo comunitario. En virtud de esta aplicación, sólo uno de los componentes de una familia jornalera de cuatro miembros podrá acogerse a los beneficios del empleo comunitario.

Esta práctica gubernativa, estrictamente legal, había sido hasta ahora realizada con gran flexibilidad en la provincia de Sevilla. La nueva rigidez ha hecho declarar a Juan Antonio Romero, secretario general de CC OO del Campo, que el Gobierno socialista tiene una política de empleo comunitario más reaccionaria que los últimos gobiernos franquistas". Por su parte, el Sindicato de Obreros del Campo (SOC), ha reaccionado con la extensión de los encierrosque desde hace unos días afectaban a las localidades de Aguadulce y Marinaleda, aunque en esta última población se exige también la respuesta de las autoridades a los planes de explotación agraria cooperativa formulados por el activo sindicato antes citado hace varios meses.

No obstante, junto a estas protestas coyunturales por el empleo comunitario, la gran batalla del campo andaluz continúa siendo la reforma agraria. Al anuncio de ocupaciones de fincas por parte de CC OO (véase EL PAÍS de ayer), hay que añadir la decisión prácticamente tomada ya por el SOC de iniciar también en- diciembre su propia campaña de presión, que incluye asimismo ocupaciones de tierras. Esta misma tarde se reúne el comité ejecutivo del, SOC para concretar sus movilizaciones, aunque puede ya anunciarse que el 4 de diciembre se celebrará en Jerez de la Frontera el llamado Día de la tierra, promovido por esta organización.

A pesar de la coincidencia en su, actitud crítica sobre la reforma agraria proyectada por el Gobierno Escuredo, está por ver sí CC OO y SOC llegan a la unidad de acción que la central de hegemonía comunista viene persiguiendo con insistencia en los últimos tiempos. La propia dirección del SOC -sindicato con base muy variable y escasa desde el punto de vista numérico- se encuentra dividida ante las proposiciones de unidad de CC OO.

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