La nueva oferta de Andropov es propaganda, según el Gobierno de la RFA
Para el Gobierno de la República Federal de Alemania, las cartas del dirigente soviético Yuri Andropov al canciller alemán federal, Helmut Kohl, y a 57 diputados socialdemócratas no contienen nuevos elementos de cara a las negociaciones de desarme de Ginebra, el lugar adecuado para hacer nuevas propuestas.
El portavoz del Gobierno federal, Peter Boenisch, declaró ayer en Bonn que el Gabinete ve con preocupación que la cifra de propuestas propagandísticas por parte de la Unión Soviética se incrementa y no está en consonancia con las que hace en la mesa de negociaciones de Ginebra"....
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Para el Gobierno de la República Federal de Alemania, las cartas del dirigente soviético Yuri Andropov al canciller alemán federal, Helmut Kohl, y a 57 diputados socialdemócratas no contienen nuevos elementos de cara a las negociaciones de desarme de Ginebra, el lugar adecuado para hacer nuevas propuestas.
El portavoz del Gobierno federal, Peter Boenisch, declaró ayer en Bonn que el Gabinete ve con preocupación que la cifra de propuestas propagandísticas por parte de la Unión Soviética se incrementa y no está en consonancia con las que hace en la mesa de negociaciones de Ginebra".
Boenísch ya había declarado la víspera que la carta de Andropov a Kohl no contenía nada nuevo; en lo esencial, una repetición de los puntos de vista soviéticos ya "conocidos". El portavoz considera una carga para las conversaciones de desarme las cartas a políticos socialdemócratas.
Total confusión en Bonn
La confusión en Bonn es total, y no pasa un día sin que aparezcan uno o dos informes nuevos con filtraciones de un lado u otro sobre nuevas propuestas para Ginebra por parte de los soviéticos o los norteamericanos. Se llega así a la paradójica situación de que el Gobierno federal llegó a publicar una nota de rectificación contra el diario derechista Die WeIt, a quien acusó de "desinformación, que deforma totalmente las verdaderas intenciones del Gobierno".Esta dura nota resulta todavía más picante si se tiene en cuenta que Die Welt se mueve en la misma onda ideológica que el Gobierno de centro-derecha de Bonn, y el último puesto periodístico del portavoz Boenisch fue precisamente el de director de Die Welt.