Moscú quiere un adelanto de las conversaciones de Ginebra con EE UU

Moscú es favorable al adelanto en un mes de la reanudación de las negociaciones con Washington sobre los euromisiles, concretamente al 19 de abril en lugar de el 17 de mayo, como estaba inicialmente previsto, informan fuentes diplomáticas belgas.La limitación de¡ armamento nuclear en Europa constituyó el núcleo de las entrevistas que mantuvieron el lunes en Moscú el ministro soviético de Asuntos Exteriores, Andrei Gromiko, y su homólogo belga, Leo Tindemans. Según la información difundida por la agencia Tass tras las conversaciones, ambos interlocutores coincidieron en dar prioridad a la cuest...

Moscú es favorable al adelanto en un mes de la reanudación de las negociaciones con Washington sobre los euromisiles, concretamente al 19 de abril en lugar de el 17 de mayo, como estaba inicialmente previsto, informan fuentes diplomáticas belgas.La limitación de¡ armamento nuclear en Europa constituyó el núcleo de las entrevistas que mantuvieron el lunes en Moscú el ministro soviético de Asuntos Exteriores, Andrei Gromiko, y su homólogo belga, Leo Tindemans. Según la información difundida por la agencia Tass tras las conversaciones, ambos interlocutores coincidieron en dar prioridad a la cuestión de los euromisiles.

Gromiko, precisa la agencia oficial soviética, subrayó ante su huésped la necesidad de Regar a "acuerdos apropiados" en las conversaciones soviético-norteamericanas de Ginebra. El ministro soviético trató igualmente de "atraer la atención" de Tindemans sobre las propuestas realizadas por el secretario general de¡ partido comunista soviético, Yuri Andropov, que "abren la vía a una solución del problema de (la) limitación de los armamentos nucleares en Europa sobre una base de equidad, sin poner en peligro la seguridad de nadie". Tass también informa que Gromiko reiteró el rechazo soviético de "la pretendida solución provisional" norteamericana y condenar la actitud de Estados Unidos, que busca "romper el equilibrio de fuerzas".

Gromiko insistió en las propuestas del Pacto de Varsovia sobre la firma de un tratado de no agresión entre los Estados miembros de esta organización y los integrados en la OTAN.

Durante estas conversaciones, que, según Tass, se han desarrollado en una "atmósfera constructiva y franca" -lo que en la terminología soviética quiere dar a entender que importantes divergencias separan a los interlocutores-, ambas partes se pronunciaron a favor de la "continuación del proceso europeo iniciado en Helsinki".