Cartas al director

El catalán en el barrio Pomar de Badalona

Me decido a escribir a raiz del artículo de Francisco Candel Cataluña con C de Cultura. Comparto el punto de vista en la mayoría de los aspectos tratados, pero hay uno del que difiero sensiblemente. Candel explica las quejas de las mujeres del barrio Pomar, de Badalona, y dice que los hijos de estas señoras quieren aprender catalán y no pueden hacerlo por una lamentable falta de maestros de catalán.Imagino que no se refiere a maestros especialistas de catalán, sino a maestros capacitados para enseñar correctamente nuestra lengua. Lamento no estar de acuerdo con esta apreciación. Vengo t...

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Me decido a escribir a raiz del artículo de Francisco Candel Cataluña con C de Cultura. Comparto el punto de vista en la mayoría de los aspectos tratados, pero hay uno del que difiero sensiblemente. Candel explica las quejas de las mujeres del barrio Pomar, de Badalona, y dice que los hijos de estas señoras quieren aprender catalán y no pueden hacerlo por una lamentable falta de maestros de catalán.Imagino que no se refiere a maestros especialistas de catalán, sino a maestros capacitados para enseñar correctamente nuestra lengua. Lamento no estar de acuerdo con esta apreciación. Vengo trabajando en este barrio desde hace tres años y creo sinceramente que profesores -hay. Lo que no hay, y en esto contradigo a Candel y a las madres de Pomar, son ganas de aprender el catalán. La mayoría se toman el catalán a broma. En esto influye, como no, el pasotismo de los padres en el tema. Hay honrosísimas excepciones, pero los números cantan: del total de alumnos, 70 practican a menudo el catalán y 946 no lo practican./

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