El presidente de Bolivia, aclamado por millares de mineros del estaño

El presidente de Bolivia, Hernán Siles Zuazo, ha sido aclamado por miles de trabajadores del combativo sector minero, a pesar de que les Pidió sacrificios y anunció que no habría aumentos inmediatos de salarios. Siles visitaba la cuenca estañífera de Catavi en el trigésimo aniversario de la nacionalización de la minería boliviana.Ataviado con ropa deportiva y cubierto con su característica gorra de visera, Hernán Siles habló a los trabajadores de uno de los más importantes centros estañíferos del país andino, a cuatrocientos kilómetros de La Paz, y fue ovacionado repetidamente al prometer que,...

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El presidente de Bolivia, Hernán Siles Zuazo, ha sido aclamado por miles de trabajadores del combativo sector minero, a pesar de que les Pidió sacrificios y anunció que no habría aumentos inmediatos de salarios. Siles visitaba la cuenca estañífera de Catavi en el trigésimo aniversario de la nacionalización de la minería boliviana.Ataviado con ropa deportiva y cubierto con su característica gorra de visera, Hernán Siles habló a los trabajadores de uno de los más importantes centros estañíferos del país andino, a cuatrocientos kilómetros de La Paz, y fue ovacionado repetidamente al prometer que, en cuanto la crítica situación económica boliviana lo permita, los trabajadores serán el sector que reciba el mayor esfuerzo de la Administración.

El presidente Siles, en su primer viaje al interior del país desde que asumiera hace tres semanas la jefatura del Estado, prometió cogestión obrera en las empresas públicas e invitó a los sindicatos a colaborar en las tareas de Gobierno.

Millares de mineros, uniformados con sus cascos e impermeables y acompañados algunos por sus esposas e hijos, escucharon atentamente el mensaje del presidente, encaramado en una improvisada tribuna. Siles aseguró a su auditorio que "la democracia nunca más nos será arrebatada", y destacó que la restauración del régimen constitucional en Bolivia ha sido posible gracias al esfuerzo y la lucha de los trabajadores. El primer mandatario boliviano señaló como puntos centrales de su Gobierno la fijación de un salario mínimo vital con carácter móvil y la implantación de la cogestión obrera en las empresas públicas. Respecto a las medidas económicas que adoptará, Siles subrayó que "ninguna se tomará sin dialogar con los trabajadores" y afirmó que el Gobierno está en contacto permanente con la Central Obrera Boliviana (COB).

En el acto desarrollado en Catavi con ocasión del aniversario de la nacionalización minera, varios dirigentes sindicales pidieron la retirada de las guarniciones militares de los centros estañíferos.

Con una producción de 18.000 toneladas anuales de estaño, que suponen alrededor del 70% de los ingresos de Bolivia, las catorce empresas y seis plantas industriales de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) son el principal soporte del país andino. La Corporación está sumida en una grave crisis por la baja del estaño en los mercados internacionales y arrastra cien millones de dólares de déficit acumulado.

La falta de inversiones y la corrupción administrativa son algunas de las causas de las dificultades del sector, que emplea a 26.000 trabajadores. Fuentes de la Corporación Minera aseguran que se han realizado grandes negocios particulares que han perjudicado gravemente la rentabilidad de Comibol.

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