Regresa a Madrid la delegación española que discute el acuerdo pesquero con Marruecos

La delegación española que discutía en Rabat las condiciones de la prórroga del acuerdo pesquero con España -prolongado en principio por decisión del rey Hassan II hasta fines de este año-, regresó ayer a Madrid para consultar con el Gobierno español. No se ha precisado, por el momento, si los negociadores españoles regresarán a Rabat. Es indudable que el tiempo apremia porque el plazo de vigencia del actual convenio expira el próximo día primero de abril, y aunque existe el acuerdo de principio del monarca de prolongarlo hasta el 31 de diciembre, ello no implica que no se deba llegar a un ent...

La delegación española que discutía en Rabat las condiciones de la prórroga del acuerdo pesquero con España -prolongado en principio por decisión del rey Hassan II hasta fines de este año-, regresó ayer a Madrid para consultar con el Gobierno español. No se ha precisado, por el momento, si los negociadores españoles regresarán a Rabat. Es indudable que el tiempo apremia porque el plazo de vigencia del actual convenio expira el próximo día primero de abril, y aunque existe el acuerdo de principio del monarca de prolongarlo hasta el 31 de diciembre, ello no implica que no se deba llegar a un entendimiento técnico antes de la finalización del convenio.

Existe el temor de que en la semana que resta no se puedan superar los escollos que representan las últimas exigencias negociadoras de Marruecos. Como habían explicado fuentes marroquíes, éstas se centran en dos direcciones fundamentales: reducción considerable del esfuerzo pesquero español, y aumento importante de los cánones a pagar por pescar.Los marroquíes, conscientes de la envergadura de sus actuales exigencias, han afirmado que, al fin y al cabo, éstas son "normales ante toda negociación" y que "de las discusiones debe resultar siempre el justo medio beneficioso para ambas partes".

Es justamente ese beneficio mutuo el que fue señalado por el ministro de Agricultura y Pesca, José Luis Álvarez, cuando dijo que "España está evidentemente en disposición de discutir una cooperación global a largo plazo como interesa a Marruecos", pero que "las contrapartidas por la actividad pesquera tienen un límite en la necesidad de que éstas sigan siendo rentables".

Rentabilidad en entredicho

Esta rentabilidad pudiera estar ahora en entredicho a juzgar por las demandas que los propios marroquíes han sugerido, que han formulado y que más o menos han sido expuestas en filtraciones controladas a su Prensa.Ello puede tener como consecuencia una interrupción de la actividad pesquera a partir del día primero de abril, si antes no se ha llegado a un acuerdo, que por el momento sólo parece que pueda ser político y -como durante las negociaciones de marzo de 1981- resultado de una decisión en ese sentido del rey Hassan II.

Es, sin embargo, en este último aspecto en donde parece existir una contradicción en la postura del propio monarca. A los ministros Pérez-Llorca y José Luis Álvarez, el rey Hassan II dijo, cuando les recibió hace días, que "las negociaciones entre España y Marruecos deben dejar de ser discusiones de tenderos, para pasar a ocuparse de los grandes designios".

Parece ser, no obstante, que los grandes designios de Marruecos con España tienen por el momento como plazo límite el próximo 31 de diciembre y que el soberano alauita no desea ir más lejos en su cooperación hasta que no quede suficientemente aclarado el futuro político español y el de UCD, en particular, pendientes de las próximas elecciones generales españolas de 1983.

Planteamientos de Rabat a largo plazo

Precisamente, por esto último, es por lo que se han introducido ciertas paradojas en las negociaciones, cuya primera ronda acaba de concluir.Estas pueden resumirse así: el rey de Marruecos propone discutir solamente sobre grandes planteamientos a largo plazo; la parte española confirma -como señalaron los ministros Pérez-Llorca y José Luis Álvarez- su deseo de que así sea; los responsables de la pesca marítima de Marruecos presentan a la parte española demandas que sólo pueden ser asumidas económicamente en un programa a largo plazo.

Sin embargo, lo único concreto es la oferta del rey Hassan II de prolongar el actual convenio hasta finales del presente año, es decir, nueve meses, tres menos que el actual.

Esta situación contradice, no obstante, el buen clima que según todos los indicios existe en las relaciones hispano-marroquíes actuales que se ha manifestado en las últimas semanas por la entrevista de los reyes Juan Carlos y Hassan II en Palma de Mallorca, por la visita a Marruecos de los ministros españoles José Pedro Pérez-Llorca y José Luis Álvarez, y por todo un calendario previsto de visitas de ministros marroquíes a España, y españoles a Marruecos, que se realizarán a partir del próximo mes de abril.